Las lágrimas de Lionel Messi en el pecho de Diego Armando
Maradona resumieron ayer el sentimiento de Argentina, eliminada
del Mundial por goleada, en manos de Alemania. El astro deja
Sudáfrica sin un solo gol, y se lleva, junto a sus compañeros,
cuatro tantos germanos que desnudaron un centro de campo y una
defensa débiles.
A Paraguay no le fue mejor. Dejó todo en la cancha, pero cayó
por la mínima diferencia de 1-0 frente a España. A la albirroja
le anularon un gol y, luego, Óscar Cardozo desperdició un
penalti, que pudo haber extendido el partido a la fase de
penales.
Ahora, Uruguay es el único equipo latinoamericano en
semifinales; el martes, tendrá que vérselas con Holanda, en
tanto que Alemania y España definirán el pase a la final el
miércoles.
En las fotos, las lágrimas de Messi y Cardozo. |