El cementerio ya no estuvo tan concurrido en el Día de Difuntos:
el encuentro entre vivos y muertos se trasladó a viviendas
particulares
Familiares de difuntos ofrecieron chicha, cócteles, mistelas y
un plato de mondongo a cambio de rezos, en los tradicionales
q’hanchacus
Tras haber asistido a un q’hanchacu, un hombre murió en su casa,
intoxicado con una sustancia amarillenta, según un informe
preliminar
El excesivo consumo de alcohol volvió a repetirse, pero no
faltaron ejemplos del rescate de las tradiciones populares con
moderación |