TRAS RECHAZAR CONVENIO CON EL GOBIERNO
Sucre/CORREO DEL SUR
El ampliado nacional del transporte pesado que se desarrolló ayer en Sucre decidió esperar hasta el lunes para determinar si el sector va o no al paro por el saneamiento obligatorio de remolques y semirremolques que ordenó el Gobierno Nacional.
Tras rechazar el convenio firmado por la Confederación Sindical de Choferes de Bolivia con el Gobierno sobre el asunto, la dirigencia de los transportistas de los departamentos de Chuquisaca, Santa Cruz, Potosí, Cochabamba, Beni y La Paz decidió darse hasta el lunes para determinar acciones futuras.
“El convenio, no satisface las expectativas del transporte nacional. Hemos quedado en bajar a las bases y hacer conocer el lunes las negociaciones que ha sostenido la Confederación con el Gobierno. Ya veremos qué determinaciones desde el lunes”, dijo ayer el secretario ejecutivo del Sindicato de Transporte Pesado Sucre, Oscar Reynolds.
“Hemos rechazado ese convenido, porque nos han mentido los miembros de la Confederación. Dijeron que con 700 dólares podíamos nacionalizar, y es en realidad cuesta de 1.400 a 1.500 dólares. Los remolques y semirremolques son una herramienta de trabajo. No son un motorizado. Son parte de nuestra herramienta de trabajo”, explicó Reynolds, para sustentar la decisión asumida por el sector.
Los transportistas consideran que si lo anterior se confirma, constituirá “en una carga económica demasiado pesada” para los transportistas, y añadieron que se les obligaría a “tributar doble”. “Por eso hemos rechazado el convenio con el Gobierno. Consideramos que es demasiada carga económica sobre el transporte pesado”, insistió Reynolds.
El Ministerio del área emitió recientemente una resolución ministerial, la 491, que establece plazos y procedimientos para el saneamiento legal de remolques y semirremolques, norma con la que los transportistas no están de acuerdo, ya que consideran que los remolques y semirremolques son implementos de sus motorizados y no motorizados independientes.
“El transporte pesado de carga está siendo agraviado por este Gobierno autoritario, de la manera más abusiva y arbitraria, queriendo imponer a un saneamiento de nuestros equipos que son accesorios y no tienen locomoción propia (carecen de motor y trasmisión), que son parte de nuestras herramientas de trabajo que ya están nacionalizadas”, señaló el sector ayer en un comunicado conjunto de las organizaciones de transporte pesado de la región.
Por lo mismo, Reynolds dijo ayer que “puede ser que el sector se sume al paro” iniciado por los transportistas de La Paz y El Alto hace un par de días. Lo decidirán el lunes, en un nuevo ampliado en Sucre.