Un excelente reto, en efecto…
Un excelente reto, en efecto…
Gary Antonio Rodríguez Álvarez.- El Encuentro Agroindustrial Productivo "Más inversión y Más Empleos" organizado el 11 de julio de 2013 por la Fepsc, Cainco y CAO ante un imponente marco de productores agropecuarios, agroindustriales y gremios empresariales, podría marcar un "antes" y un "después" no sólo para el sector, sino también para consumar plenamente la soberanía alimentaria en el país, mucho más, cuando el Vicepresidente del Estado dijo en tal oportunidad, que era hora de pensar no sólo en nuestras necesidades, sino en alimentar al mundo, algo que coincide con el sentir agroproductivo cruceño.
La presencia del Vicepresidente, del Representante Presidencial de la Agenda Patriótica 2025, de la Presidenta del Senado y de altas autoridades del Ejecutivo relacionadas con la temática fue importante para conocer el ánimo del sector agroproductivo de invertir 13.000 millones de dólares hasta el 2025 a fin de triplicar la producción de alimentos –de 15 a 45 millones de toneladas– avanzar en su industrialización y multiplicar por 10 el volumen actual de las ventas de alimentos al mundo.
El Encuentro sirvió también para plantear al Gobierno las políticas necesarias a fin de incrementar de forma sostenible el área agrícola y de pasturas cultivadas, de 5 a 13 millones de hectáreas; el aumento de la productividad; la transformación de las materias primas; la mejora de la infraestructura, logística y transporte; y, la suspensión las restricciones a la exportación de alimentos.
De la seriedad con que se tome semejante propuesta, con visión de país, dependerá que dos agendas –una social y otra productiva– coincidan sin mayor dificultad. La "Agenda Patriótica del Bicentenario 2025" concebida para eliminar la extrema pobreza y reducir la pobreza moderada, podría ser apuntalada por el "Acuerdo Productivo por Bolivia" del empresariado, especialmente cuando el Vicepresidente expresó que el planteamiento de expandir el área de siembra y un trabajo sinérgico público-privado era posible.
¿Alguien podría oponerse a un proyecto tan virtuoso por parte de quienes cada año lo arriesgan todo para alimentarnos con el fruto de su esfuerzo? Si el propio Vicepresidente dijo que se trataba de un excelente reto y que el Gobierno se sumaba a él, correspondería ahora generar una agenda conjunta que en lo inmediato induzca a que en los niveles operativos de los ministerios y de las entidades estatales que tienen que ver con el sector agroproductivo y exportador las cosas funcionen mejor, como una señal de buena voluntad.
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