RAÍCES Y ANTENAS

Consejos-conejos para corazones financieros

Consejos-conejos para corazones financieros

Gonzalo Chavez A..- Vía Facebook o mi blog con frecuencia recibo varias preguntas que buscan consejos económicos, reproduzco algunas de ellas: "Distinguido analista, tengo unos pesitos, que son el ahorro de toda mi vida? Qué hago para me mi riqueza no se vuelva papel?" "Estimado Lic. tengo mi dinero en dólares en el Colchón Bank. Y en las noches no puedo dormir y mis pesadillas se han vuelto psicodélicas, la plata parece que tuviera vida, toda las madrugadas los billetes hacen bulla bajo la cama, y encima, mi marido ronca como sacristán de pueblo y ahora duerme sólo con un ojo, cuidando los morlacos. ¿Usted que todo lo sabe, que hago con mis ahorritos? ¿Cómo recupero la paz y el amor en mi lecho? ¿Pongo mi platita en el banco, intento comprarme un departamentito, me inscribo al MAS para las próximas elecciones y así tener una pega segura?".
Queridas amiga (os), y demás corazones financieros amartelados es tiempo de no obsesionarse con los verdes, que seguramente ya les trajeron deleite y felicidad. Pero hay que sacudirse del karma de Washington y pensar en otras aplicaciones financieras. Recuerde que son tiempos de anti-imperialismo. En el corto plazo quien esté manteniendo su riqueza en dólares, está perdiendo como en la guerra, especialmente, si quiere convertir su dinero en Bolivianos, porque además de perder con la apreciación cambiaria de los últimos años, existe el cuchillazo del impuesto a las transacciones financieras que sólo se aplica a las operaciones en dólares.
Pero la pregunta que se estará haciendo, apreciado lector, es si el dólar seguirá siendo una mala inversión por mucho tiempo. No será que, como ya se anuncia una crisis internacional (Argentina ya tiene problemas el tipo de cambio por ejemplo), los verdes escaseen y como dice Doña Hortensia –una vecina que hizo mucha plata en la época de la UDP– "el Boliviano se devaluará". Este es un temor legítimo que se alimenta del pasado de inestabilidad que vivimos en Bolivia, y de ciertos datos de la coyuntura como la caída de los precios de los minerales. "Ya los conozco a estos perlas de los políticos, la van a tarrear", me dice la Soros del Choqueyapu. Lo que la especuladora nacional quiere decirnos es que si pensamos en el largo plazo, digamos 15 años, tal vez sea prudente mantener parte de los ahorros en dólares, siguiendo el adagio popular que dice "Más vale plumífero volador en fosa metacarpiana que segunda potencia de diez ululando por el espacio" (Más vale pájaro en mano en dólares que cientos de Bolivianos volando).
¿Y ahorrar en Bolivianos esta mejor que el guardar la plata en dólares? Lamentablemente, no. En la actualidad, en el mundo y en Bolivia, la frase de Bertold Brecht ¨mejor que asaltar un banco, es fundar uno¨, se hecho carne. Las tasa de interés de pasiva, la que a uno le pagan por los depósitos, como gran cosa, no pasan del 3% al año. Siendo que la inflación está en torno de 5%, los depositantes estamos recibiendo tasa de interés negativas, es decir estamos perdiendo plata. Por esta brecha, en los últimos años se está produciendo una transferencia de activos de los ciudadanos hacia los bancos. Claro, que existen algunas opciones de inversión mejores, como son los bonos del Banco Central de Bolivia que ofrecen rendimiento que varían entre 4 y 5 % al año, tasas que por lo menos compensan mejor la inflación, pero esta ventana de inversión es para montos pequeños.. Entre tanto las tasas activas, aquellas que el banco cobra por los créditos (comerciales, de consumo o productivos por ejemplo) que ofrece, son elevadas varían entre 9 y 24%. Ahora bien, los créditos que tienen una tasa interesante son los de vivienda. Esta tasa de interés comienza con 5% para los dos primeros años, después puede subir 2 o 4 puntos porcentuales.
¿Y el sueño dorado de la casa propia? ¿Puede hacerse realidad en la luminosa época del proceso de cambio? Sin duda, este es un tiempo donde es mejor invertir en ladrillos, como mencionado, los préstamos para la vivienda están competitivos. El problema está en los precios de la tierra urbana y el metro construido, que han subido de manera importante en los últimos años. Por ejemplo, el valor de los departamentos en las principales ciudades de Bolivia, por ejemplo para las clases medias, varían entre 800 y 1200 dólares por metro construido. A pesar del precio elevado, este parece ser un momento para adquirir el departamento o casita de los sueños y mejor si está en el rango de precios que estarán controlado por el gobierno, con la nueva Ley. En concreto, 100 mil dólares para departamentos y 120 mil verdes para casas. Aquí lo que hay que ver con cuidado es si el flujo de ingreso de la familia alcanza y es lo suficientemente estable para cubrir los pagos al banco, por lo menos para 15 años.
Bueno estimados y amartelados lectores. Tres consejos-conejos de cierre. 1) no se debe colocar todos los huevos en la misma canasta. Es decir diversifique sus inversiones. 2) Cambie de colchón y al nuevo sométalo a una milluchada financiada por una ONG. 3) Finalmente, en materia de consejos sabemos que: "a equino objeto de un obsequio no se le aquilatan las piezas odontológicas" (A caballo regalado no se le miran los dientes).