NADA DICE: "Yo estoy con el levantamiento de las mujeres en el mundo árabe. Por completar mi niñez".

SU TÍA DE 14 AÑOS SE SUICIDÓ POR UN MATRIMONIO FORZADO

Yemen: Niña denuncia que pretenden casarla

Nada Al-Ahdal asegura que prefiere morir antes que someterse al matrimonio planificado por sus padres a cambio de dinero.

Internet y CORREO DEL SUR

Una niña yemení de apenas 11 años decidió valientemente denunciar a través de un video el casamiento forzado al que la quieren obligar sus padres, quienes incluso llegaron a amenazarla de muerte si se negaba.
En la grabación, que a la fecha supera 7 millones de visitas en YouTube, Nada Al-Ahdal cuenta que está condenada a un matrimonio concertado y por eso huyó de su casa. Ahora vive con su tío, que la acoge y la apoya, y fue quien precisamente grabó el video subido el 8 de julio, cuando ambos se dirigían a denunciar el caso a las autoridades.
"Me escapé de mi familia. No puedo vivir más con ellos. Suficiente. Quiero irme a vivir con mi tío (...) He logrado resolver mi problema, pero algunas niñas inocentes no pueden resolver los suyos, y podrían morir, suicidarse", afirma Nada.
"Hay muchos casos como este. Algunas niñas deciden tirarse al mar y ya están muertas. Esto no es normal para personas inocentes", agrega.
La niña presentó una denuncia ante la Policía en contra de su madre diciendo que si se casara, "no tendría ni vida ni educación”.
En una entrevista a la televisión de Yemen, Nada acusa a su madre de buscar dinero a través del matrimonio arreglado.
“No soy un artículo para la venta. Soy un ser humano y preferiría morir antes que casarme a esta edad”, asegura.
La niña recuerda la historia de su tía que después de un año de matrimonio forzado, se roció con gasolina y se prendió fuego cuando tenía 14 años. Su marido bebía y la golpeaba con cadenas.


HUBO UN INTENTO
DE CASARLA ANTES
Según publica el portal web NOW en una entrevista realizada al tío de Nada, Abdel Salam al-Ahdal, diseñador gráfico en una cadena de televisión de Yemen, esta no sería la primera vez que los padres de la niña intentan casarla en contra de su voluntad: "Nada no tenía ni siquiera 11 años cuando concertaron su primer matrimonio; tenía exactamente diez años y tres meses. No podía permitir que se casara y destrozara su futuro".
Afortunadamente, en esa ocasión, el tío de Nada consiguió disuadir al pretendiente, un expatriado yemení residente en Arabia Saudí con mucho dinero y unas décadas mayor que la niña.
Los padres de Nada no se dieron por vencidos, por lo que hace un mes visitaron a su hija en casa de su tío y le pidieron que fuera a pasar con ellos un tiempo, sin comunicar sus verdaderas intenciones: concertarle un nuevo matrimonio. Nada escapó al enterarse que sus padres la querían volver a casar.
Actualmente, vive con su tío. Sin embargo, su denuncia ejemplifica el drama que viven muchísimos niños y niñas obligados a casarse en contra de su voluntad.