Una de las celebraciones del cuadro celeste de Bolívar.
Bolívar se pasea en su casa con una goleada a Oriente
Bolívar se pasea en su casa con una goleada a Oriente
La Paz / La Prensa
Sin mucho esfuerzo y en una tarde totalmente celeste, Bolívar goleó ayer a Oriente Petrolero 6-0 y de estar manera escala a la tercera posición de la tabla de posiciones del torneo Apertura 2013-2014 de la Liga.
Bolívar fue una aplanadora ayer, necesitó sólo de 45 minutos en la primera parte para anotarle cuatro goles al equipo cruceño, mientras que en el segundo tiempo se dio un respiro y completó la media docena a través de una destacada actuación del yungueño Jaime Arrascaita.
La fórmula de Portugal, de rotar jugadores en el plantel, está dando sus frutos; la Academia no sintió las bajas de los jugadores de la Selección Nacional en su once inicial y fue superior durante todo el compromiso a Oriente Petrolero.
El primer tanto celeste llegó a los 22’, el español Sánchez Capdevila aprovechó una desconcentración en la zaga de Oriente para mandar un centro que fue cabeceado por Eguino para inaugurar la cuenta.
A los 33’ tuvo que salir el uruguayo Ferreira a causa de una lesión en el muslo derecho, en su reemplazo ingresó Cardozo quien se fue por el sector derecho y mandó un pase para que Arrascaita anote su primer gol en la Liga y el segundo del celeste.
Apenas pasaron dos minutos (35’) y Arce apareció en la cuenta mediante un derechazo que hizo estéril la estirada de Arias para el tercer gol.
Cinco minutos después (40’), Cardozo puso el cuarto tanto mediante un tiro penal.
Bolívar paró su aplanadora en la segunda parte, tuvo llegadas mediante Callejón, Arrascaita y Cardozo, pero Arias contuvo los ataques celestes.
El quinto gol llegó luego de una buena jugada por la derecha de Arrascaita quien se llevó varios rivales y dejó el esférico para que Arce anote a los 68’.
La media docena llegó en el primer minuto de adición (91’) luego de una escapada de Arrascaita quien tuvo la ayuda de Pablo de Muner quien en una jugada desafortunada puso el balón en su propio arco.
Fue el mejor Bolívar que se vio en los últimos tiempos y el peor Oriente que vino a La Paz a jugar.
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