CONFLICTO. El ministro británico de Defensa, Philip Hammond (izq), y un par de sus consejeros llegan a Downing Street para evaluar la crisis.
CONFLICTO. El ministro británico de Defensa, Philip Hammond (izq), y un par de sus consejeros llegan a Downing Street para evaluar la crisis.

LA OFENSIVA ESTARÍA A CARGO DE FUERZAS ALIADAS

Aumenta la probabilidad de ataque militar a Siria

Aumenta la probabilidad de ataque militar a Siria

El Gobierno de EEUU no tiene dudas de que Al Asad utilizó armas químicas

Redacción Internacional/EFE

Los indicios de que habrá una próxima operación militar contra Siria crecieron ayer, y fuentes de la Casa Blanca incluso precisaron a la cadena de televisión NBC que los ataques, por parte de Estados Unidos y sus aliados, podrían comenzar el jueves y durar tres días.
No obstante, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, no tiene dudas de que el régimen sirio es responsable del uso de armas químicas y de que "debe haber una respuesta", pero aún no tomó una decisión sobre cómo hacerlo, dijo la Casa Blanca.
El portavoz presidencial, Jay Carney, aseguró que Obama anunciará una decisión tras consultar con sus aliados y después de que se publique un informe de inteligencia sobre el denunciado ataque del pasado 21 de agosto en las afueras de Damasco, que causó más de 1.000 muertos.
Según el diario "The Washington Post", las operaciones podrían durar no más de dos días y limitarse al lanzamiento de bombas guiadas desde el mar (con destructores o submarinos) o el uso de bombarderos aéreos de largo alcance.
El secretario de Defensa, Chuck Hagel, dijo que las fuerzas estadounidenses ya están preparadas para cumplir las órdenes que les de el presidente Obama.
"Hemos desplazado efectivos a la zona para ser capaces de responder a cualquier opción que decida el Presidente", afirmó a la televisión británica BBC Hagel, quien posteriormente consultó telefónicamente con sus homólogos británico y francés.
Rusia no ocultó su malestar y advirtió de las "consecuencias catastróficas" de una intervención militar en Siria sin el mandato del Consejo de Seguridad de la ONU.
El portavoz de la Cancillería rusa, Alexandr Lukashévich, afirmó que "los intentos de obviar el Consejo de Seguridad, creando una vez más pretextos artificiales y sin pruebas para intervenir en la región pueden derivar en más sufrimiento en Siria y consecuencias catastróficas para otros países de Oriente Medio y el norte de África".
El régimen sirio, por su parte, insistió en que el supuesto uso de armas químicas contra civiles, que habría causado la muerte la semana pasada de entre 355 y 1.300 personas, según la fuente, y que supondría el motivo directo de una eventual intervención militar, es "un pretexto" que es "falso e infundado".
El Gobierno de Bachar al Asad retó a la comunidad internacional a presentar "cualquier prueba" que demuestre el uso de armas químicas por el Ejército, y dijo que una acción militar internacional sobre su país sólo servirá a los intereses de Israel y de Al Qaeda.
Rusia, en su apoyo a Damasco, no se cansa de repetir que estas acusaciones son muy parecidas a las que hace diez años se usaron como pretexto por Estados Unidos y sus aliados para atacar Irak y derrocar el régimen de Sadam Husein, que a la postre resultaron ser falsas.

Medidas

Desde El Cairo, la Liga Árabe pidió al Consejo de Seguridad de la ONU que supere las diferencias entre sus miembros y tome medidas "disuasorias y necesarias" contra el régimen sirio por su uso de armas químicas contra los civiles.