PIQUETE. 11 personas, a la cabeza del alcalde Moisés Torres, ayunan desde la tarde de ayer en la Alcaldía de Sucre, en rechazo al proyecto de ley del TSE.
LA INSTITUCIONALIDAD CHUQUISAQUEÑA Y EL PODER POLÍTICO REGIONAL INICIARON DE MANERA UNIFICADA EL PARO CÍVICO Y TERMINARON DIVIDIDOS AL FINAL DEL DÍA
La Alcaldía lidera una huelga y los cívicos acuden al Gobierno
La Alcaldía lidera una huelga y los cívicos acuden al Gobierno
El paro cívico fue casi total y ahora se anuncian nuevas medidas de presión
Sucre/CORREO DEL SUR
El paro cívico de Chuquisaca dejó ayer como saldo dos cosas: la instalación de una huelga de hambre en la Alcaldía de Sucre y la decisión del Comité Cívico de acudir al Gobierno, para exigirle compensación por la reducción de escaños.
El paro fue casi total. El Comité de Defensa de Chuquisaca, compuesto por la Alcaldía de Sucre y un grupo de instituciones y organizaciones de diferente índole, acató la medida de manera disciplinada. Lo mismo hizo el Comité Cívico, la organización que convocó al paro, incluida la Gobernación de Chuquisaca. Pese al cruce de acusaciones un día antes, la institucionalidad chuquisaqueña y el poder político alzaron ayer la misma bandera de reivindicación.
Al finalizar la tarde, sin embargo, tomaron posturas distintas. El alcalde Moisés Torres, vocero del Comité de Defensa de Chuquisaca, instaló una huelga de hambre en el Salón de Conferencias de la Alcaldía a las 17:00 de ayer aproximadamente. El Comité Cívico, por su parte, decidió solicitarle al presidente Evo Morales una audiencia, para exigirle que invierta en proyectos de impacto en Chuquisaca, una especie de compensación por la reducción en la representación parlamentaria.
Torres y otras diez personas ayunan desde la tarde de ayer, en la Alcaldía: un dirigente vecinal, un dirigente indígena, un asambleísta departamental, una concejala, entre otros, componen el grupo, y hoy se instalarán otros tres piquetes de huelga de hambre: uno en la Central Obrera; otro en la Casa de la Cultura y otro más en la Universidad.
“Hemos tomado la decisión de instalar este primer piquete de huelga porque no estamos de acuerdo con la propuesta del Tribunal Supremo Electoral (TSE). Le exigimos a la Brigada que también asuma la misma medida. Queremos convocar, además, a las otras instituciones (a que se sumen). Ahora queremos ver quiénes son chuquisaqueños, desde la Gobernación, y qué chuquisaqueños nos dirigen, desde el Comité Cívico”, declaró Torres, poco antes de instalar la extrema medida. El diputado opositor Juan Luis Gantier se declaró en huelga casi a la misma hora en La Paz. Pedro Medrano, también opositor, hizo lo mismo después.
Barón, por su lado, tras calificar de exitoso el paro cívico, exigió a los parlamentarios chuquisaqueños que impidan la aprobación del proyecto de ley de redistribución de escaños y que se replieguen, en caso de que la norma sea aprobada.
También exhibió una carta en la que la entidad cívica solicita una audiencia al presidente Evo Morales. “Ya se ha cursado esta nota al Presidente, pidiéndole una audiencia, a objeto de plantearle la necesidad de que el Estado invierta mayores recursos para el desarrollo de Chuquisaca, ejecutando obras de impacto, al igual que se lo está haciendo en otros departamentos del país. Sólo de esa manera vamos a frenar la migración”, explicó.
Barón no descartó que la representación cívica decida asumir otras medidas de presión en las próximas horas, en caso de que las demandas de Chuquisaca no sean atendidas. Sobre la huelga de la Alcaldía, dio a entender que no se sumará a la misma. “Si hay algo que el paro ha conseguido, es la unidad de los chuquisaqueños, después de tantas peleas y división. Ha unido a oficialistas y opositores, y esto hay que consolidarlo en reuniones conjuntas, para pensar en proyectos de desarrollo”, matizó.
Torres adelantó que convocará a una marcha de desagravio para el próximo martes y no descartó que la misma termine derivando en un cabildo. Tampoco descartó que vaya a declararse ese día “enemigos de la región” a los parlamentarios chuquisaqueños que apoyen la propuesta el TSE.
La región paralizó ayer casi toda actividad, y el día se pareció al ya tradicional Día del Peatón. La circulación vehicular fue casi nula y el ambiente en la ciudad era de preocupación en la ciudadanía.
Barón y otros dirigentes tuvieron que obligar a cerrar algunos negocios del centro de la ciudad, entre ellos los bancos, pero el resto acató la medida sin oposición alguna. Hubo comercios abiertos y comerciantes en los alrededores del Mercado Campesino, pero el galpón principal se mantuvo cerrado.
Los motociclistas hicieron su negocio –cobraron Bs 5 por carrera–, y la mayoría de la gente permaneció en sus casas.
En las provincias, según el presidente de CIDEPRO, Freddy Montero, el nivel de acatamiento se situó entre el 95 y 98%. En Monteagudo, los comercios abrieron como todos los días, pero igual las actividades no fueron normales: hubo bloqueos.
Huelguistas
Moisés Torres, Gonzalo Pallares, Lourdes Millares, Severino Condori, Reina Arancibia, Gualberto Barahona, Amado Quispe, Gonzalo Romay, Juan Carlos Durán, Adela Padilla y Henry Calcina.
Fotos
OBEDIENCIA. Los diputados Juan Luis Gantier (PPB-CN), en huelga en La Paz.
PARO. La medida de presión fue casi total en la ciudad. Las actividades fueron mínimas.
PROVINCIAS. En Monteagudo también acataron la medida, como en el resto del Departamento.
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