Sucre, una plaza política sin líderes II

Freddy Rivas Orozco.- Yo no me jacto de ser gurú de la política, pero resulta sencillo conectar los puntos de este presente a un pasado destructor. En mi más humilde sabiduría escribí el artículo “Sucre una plaza política sin líderes I”, el mismo que identifica a un personaje que fue apartado de la silla de burgomaestre y fue sentado en el sillón de los acusados, luego aprovechando su liderazgo agonizante, y bajo la consigna de “El MAS jamás en Sucre” se apoya a un candidato que fue electo Alcalde, quien nombró a tres representantes ante Fancesa:
el primero es nombrado por la misma inercia de su liderazgo, el segundo es otro que luego de ser nombrado, permanece en el anonimato estratégico; el tercero es quien sin ningún tipo de preparación ni mérito, resultó ser útil para vomitar palabras e insultos dirigidos a las autoridades oficialistas, desde el presidente hasta cualquier ciudadano que simpatice con el MAS; la consistencia de su curul, lejos de ser un referente técnico, fue tratar de estigmatizar al MAS, labor que grita como aquel pastor mentiroso que trata de crear pánico en el pueblo ante la presencia del lobo, pero remitiéndonos a la gestión propositiva del presidente y el Gobernador, “el rebaño le quedó chico y la boca demasiado grande”.
Como dice Steve Jobs, “fue una amarga medicina, pero creo que el paciente la necesitaba”, ahora los que conformaron una coalición “saludable”, empezaron a enfermarse y terminaron abandonando la gestión de Chivé, dejándolo con sus aliados de la sigla Líder, que de Líder tiene cinco letras y en estos últimos días, sus aliados, se han convertido en sus principales detractores; esto es aún mucho más grave que lo que le ocurrió a Calígula, cuando nombró como senador y cónsul a su caballo, pues incluso le han fijado plazo hasta el mes de noviembre, para complacer sus peticiones, y lo que deja mucho que desear, para todo aquel que haya pensado en Jaime Barrón a tiempo de entregarle su voto a Líder, es que éste fue traicionado por quien ahora se hizo de su curul de director en Fancesa, aprovechando la situación legal de Barrón.
Esa es la clase de actuaciones de oportunistas que le hicieron daño a sus propios patrocinadores; por eso, cuando el alcalde anunció precipitadamente, la construcción de la Terminal de Buses, en lo primero que pensé es en que sus detractores aplaudieron su actuar sin decirlo, porque ante la evidente crisis que atraviesa la gestión de Moisés Torres, el santo remedio del alcalde será más santo para los oportunistas, porque al no tener autorización del Concejo Municipal de Sucre para emplazar la obra, y ante la inscripción que realizó la Gobernación para ejecutar este proyecto, al Alcalde le espera responder ante el pueblo y ante la justicia por “daño económico al Municipio de Sucre”, porque el lugar donde comenzó la construcción de la terminal (la ex laguna Rumi Rumi) revela que concluirá como un “Elefante Blanco”, y es ahí donde atacarán los oportunistas que, con el discurso de “persecución política” se etiquetarán como líderes defensores de la “escenificación Capitalía-Barrón-Chivé”, recordando heridas del pasado y lo que es más deshonroso, manipulando nuestros sentimientos regionales para sus apetitos personales.