INCERTIDUMBRE. Después de más de seis años, las autoridades portuguesas volverán a investigar la desaparición de la niña.
DESPUÉS DE SEIS AÑOS DE MISTERIO
Portugal decide reabrir caso de la niña Madeleine
Portugal decide reabrir caso de la niña Madeleine
La menor desapareció de un centro de verano donde estaba con sus padres
Lisboa/EFE
Seis años y medio después de la desaparición en Portugal de la pequeña británica Madeleine McCann, la Fiscalía portuguesa decidió ayer reabrir el caso para analizar en profundidad los nuevos indicios hallados por la policía lusa.
Fuentes del Ministerio Público y la Policía Judicial (PJ) confirmaron que la reapertura de la investigación, que se mantenía cerrada de forma oficial desde julio de 2008, se debe al descubrimiento de pistas que pueden contribuir a conocer más detalles sobre qué le ocurrió a Madeleine.
Estos nuevos indicios son el resultado del trabajo de un grupo de policías portugueses destinado desde marzo de 2011 a "volver a estudiar el proceso con vistas a identificar información que pudiera ser profundizada", precisó el director adjunto de la PJ, Pedro do Carmo.
La decisión de reabrir el procedimiento por parte de la Fiscalía obedece al análisis de la documentación acumulada del caso realizado por los agentes lusos durante los últimos dos años y medio, una investigación diferente pero paralela a la que lleva a cabo en el Reino Unido Scotland Yard, que divulgó recientemente el retrato robot de dos individuos que podrían haber sido testigos del suceso.
La desaparición de Madeleine McCann, que conmocionó al mundo entero y suscitó inmediatamente una enorme atención mediática, se produjo en mayo de 2007, cuando tenía apenas 3 años y se encontraba de vacaciones con sus padres en la región del Algarve, en el sur de Portugal.
Sus progenitores, Kate y Gerry McCann, declararon que dejaron a su hija durmiendo junto a sus hermanos en el apartamento mientras cenaban con unos amigos en el mismo complejo vacacional y que, a su regreso, la menor ya no se encontraba en la habitación.
La investigación fue cerrada oficialmente en julio de 2008, debido a la falta de pruebas y sin que se llegase a conocer qué pasó con la menor.
Los padres de Madeleine fueron oficialmente considerados sospechosos por la policía portuguesa de la desaparición de su hija, debido al hallazgo de vestigios biológicos de la pequeña en sus efectos personales y en un automóvil alquilado tras la desaparición.
Sin embargo, la Justicia portuguesa acabó por exculpar al matrimonio, después de que los análisis de las muestras que les incriminaban, realizados en el Reino Unido, no se consideraron concluyentes.
Gerry y Kate McCann defendieron durante estos años que Madeleine sigue viva y fue víctima de un secuestro, por lo que reclamaban la reapertura del caso.
Comisario
También escribió un libro el comisario portugués que inicialmente se encargó del proceso, Gonçalo Amaral, que decidió dimitir y jubilarse anticipadamente.
|