ABRIL. Gobierno y CGGC firman memorándum.
Generación de energía hidroeléctrica
Generación de energía hidroeléctrica
El aprovechamiento del proyecto Icla está previsto sobre el río Pilcomayo, a una distancia de 50 a 60 kilómetros de Sucre. La potencia instalada de aproximadamente 100 mw (megavatios) serviría para aportar al Sistema Interconectado Nacional (SIN). Esta capacidad cubriría holgadamente la demanda chuquisaqueña de energía y podría abastecerse incluso a parte del sur del país.
A decir del director de Energía de la Gobernación, Rubén Montenegro, el proyecto contempla la construcción de una central hidroeléctrica, una laguna artificial, una subestación eléctrica y una línea de transmisión que bien podría conectarse con la estación de La Zapatera, en las afueras de Sucre, y desde donde podría continuar a Punutuma y a San Cristóbal, donde se realiza una gran actividad minera. “De Sucre podríamos alimentar al sur del país”, dice Montenegro.
Pero también se regularían los caudales naturales para irrigar una superficie de unas 66.000 hectáreas aguas abajo de Icla. Los estudios existentes hablan de la viabilidad de regar, por gravedad, parte del Chaco chuquisaqueño y tarijeño, sin contar con el impacto a generarse en el área de influencia inmediata.
La Gobernación estima que el costo sería de $us 300 millones si se considera un promedio de costo de $us 2 millones por cada 1 mw generado, que es el promedio que maneja el sector hidroeléctrico. Esta entidad apuesta a generar entre 100 y 150 mw.
El diputado Juan Luis Gantier impulsor del proyecto desde hace un par de años, considera que Icla tiene una oportunidad mayor que otros que se encuentran en la agenda de desarrollo energético elaborada por ENDE: implica menor costo para generar mayor energía y cuenta con varios estudios. Pero también resalta el impacto social puesto que se generarían entre 2.000 y 3.000 fuentes de empleo, entre ingenieros, técnicos, obreros calificados y peones.
|