COOPERACIÓN. Civiles son desplazados en un avión militar Hércules Corps KC-130J desde la base aérea de Taclobán, Filipinas.
COOPERACIÓN. Civiles son desplazados en un avión militar Hércules Corps KC-130J desde la base aérea de Taclobán, Filipinas.

FILIPINAS RECIBE SOLIDARIDAD INTERNACIONAL

Miles de víctimas de tifón aguardan ayuda exterior

Miles de víctimas de tifón aguardan ayuda exterior

Equipos de rescate intentan llevar víveres a las zonas afectadas

Manila/EFE

Cinco días después de que el tifón "Haiyan" devastara la región central de Filipinas, el Gobierno y la comunidad internacional trabajan para asistir a las víctimas que, sin agua ni comida, esperan desesperadamente la llegada de ayuda humanitaria.
Los equipos de rescate avanzaban con dificultades para hacer llegar más materiales de primera necesidad y personal médico hacia las zonas más afectadas, como Tacloban, en la provincia de Leyte, donde varias carreteras siguen cortadas.
El presidente del Consejo para la Gestión y Reducción de Desastres filipino, Rene Almendras, dijo que "se exploran todas las alternativas" para enviar una ayuda cuyo volumen "es tan grande que no podemos moverla toda por vía aérea".
Almendras indicó que varios aviones C-130 de las fuerzas aéreas filipinas y otros facilitados por Estados Unidos vuelan directamente a Tacloban pero que el grueso de la ayuda tiene que distribuirse desde el aeropuerto internacional de Cebú.
También encuentran dificultades las organizaciones como Médicos Sin Fronteras (MSF), que desde el sábado dispone de un equipo de 23 personas en Cebú que no pudo volar a Tacloban debido al mal tiempo.


DRAMA EN LAS RUTAS
Entretanto, cientos de niños y adultos, con mensajes de socorro en mano, flanquean la carretera que lleva al norte de Cebú, una región de Filipinas duramente azotada por el tifón Haiyan, pero que pasó desapercibida debido a la gran tragedia de la ciudad de Tacloban.
"¡Ayuda, por favor!", "Necesitamos agua y comida" o "Tenemos hambre" son algunos de los mensajes que se pueden leer en los improvisados carteles que sujetan con paciencia los residentes de la zona y que agitan frenéticamente al paso de cada coche.
Miles de hogares quedaron destruidos en el norte de Cebú por los intensos vientos que también arrasaron campos de cultivo.
La Organización Mundial de Salud (OMS) asumió la coordinación de los aspectos relacionados con la salud en esta emergencia para "garantizar que los suministros se envían con rapidez hacia los lugares donde hay mayores daños como Tacloban, Cebú y la costa este de Leyte".