Los jugadores de The Strongest celebran el gol de Enrique Parada (c), el segundo del cuadro atigrado en la victoria de ayer, sobre Wilstermann.

The Strongest se aferra a la lucha por ganar la corona

La Paz / APG

The Strongest volcó el marcador ayer, en La Paz, frente a Wilstermann, y consiguió una victoria por 3-1 manteniéndose en la carrera por ganar el título del torneo Apertura de la Liga. En la recta final se convierte en la “sombra” de Bolívar, actual puntero.
El Tigre se aferra con todas sus fuerzas a su ubicación de escolta, con un punto de diferencia con relación a los bolivaristas (40). En la vigésima fecha, el cuadro local pudo revertir la cuenta para continuar cerca de la Academia.
Los atigrados se encontraron con un marcador adverso, tuvieron que sufrir varios minutos para alcanzar la igualdad y de ahí dirigirse por el camino de la victoria, aprovechando la expulsión de dos jugadores de Wilstermann.
Rodrigo Ramallo convirtió el gol para los aviadores a los 43 minutos de la primera parte con una buena definición después de recibir la habilitación de Gerardo García Berodia; el delantero aviador les ganó las espaldas a los defensores y venció al portero Daniel Vaca (0-1).
Hasta ese instante, con la victoria que se producía en Oruro a favor de Bolívar, el plantel atigrado estaba obligado a conseguir el triunfo y evitar que la diferencia fuera mayor en cuanto a los puntos.
A los 53’, los rojos ya estaban mermados con la expulsión de Cristhian Machado y a los 65’ ocurrió otra expulsión: el arquero Denis Cartagena dejó con nueve futbolistas a los aviadores.
Esta jugada cambió todos los planes de la visita, porque el penal fue convertido por Ernesto Cristaldo a los 70’. Hugo Suárez ingresó para cubrir el pórtico y no tuvo éxito en la definición desde los 12 pasos frente al mediocampista paraguayo (1-1).


LA REMONTADA
Con nueve jugadores, Wilstermann sólo aguantó siete minutos porque a los 77’ llegó el segundo gol de los gualdinegros con un disparo de derecha de Enrique Parada, lejos del alcance de Suárez, sacando ventaja al espacio que le dejaron los jugadores del elenco cochabambino.
El 2-1 era un resultado tranquilizador para el Tigre no sólo por la diferencia de hombres en el campo de juego, sino por el control de las acciones. Hubo un momento de vacío futbolístico antes de la llegada del tercer tanto.
En la última acción del partido, un desborde desde la derecha de Gabriel Ríos se transformó en el 3-1 a los 95’, cuando Jair Reinoso empujó un centro con el arco a su disposición para anotar el definitivo 3-1.