DESCONTENTO. Los jubilados protestaron para ser incluidos en el beneficio.

LOS PRIVADOS TERMINARON ACEPTANDO LA MEDIDA

Doble aguinaldo: Sorpresa de Evo Morales en 2013

Cuando el 20 de noviembre pasado, el presidente Evo Morales aprobó el Decreto Supremo 1802 del pago del doble aguinaldo y lo bautizó con el nombre de "Esfuerzo por Bolivia", jamás iba a imaginar que esa medida tendría efectos negativos y que ensancharía más las asimetrías entre aquellos que tienen más recursos y la mayoría que no tienen trabajo ni vivienda.
La política gubernamental "de efecto sorpresa" cayó como un balde de agua fría a los grandes, medianos y pequeños empresarios privados, que observaron la vigencia del decreto, pero a pesar de sus reclamos y sus cifras económicas en rojo, no les quedó otra que aceptar el pago hasta febrero próximo.
Ante un escenario alborotado por la "sorpresa" del doble aguinaldo, el Gobierno tuvo que flexibilizar su medida y acordó con los directivos de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) ampliar el plazo hasta el 28 de febrero.
Analistas en temas económicos y políticos calificaron la medida como "populista y electoral" ante el nerviosismo del Gobierno para lograr la mayor cantidad de votos para la tercera reelección de Morales.
Para Jorge Alvarado, el doble aguinaldo es una medida "electoralista e irresponsable" del Gobierno, pues provocó el incremento de precios en el mercado interno. Mientras que el analista y periodista Humberto Vacaflor advirtió que muchas empresas tendrán que declararse en quiebra a principios de 2014.
Para el investigador del Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (CEDLA), Bruno Rojas, 18 de cada 100 personas ocupadas en el país recibirán el doble aguinaldo, impuesto vía decreto, toda vez que el 80% de la población se dedica a la actividad informal y de cuenta propia.
Entre ellos, los jubilados, que protestaron para ser incluidos en el beneficio, tuvieron que contentarse con un incremento del 3% en sus rentas.


SOBRE LA INFLACIÓN
Ante las críticas, el ministro de Economía, Luis Arce, salió al frente para minimizar las advertencias de sectores empresariales y analistas económicos, afirmando que el pago del segundo aguinaldo no generará inflación ni despidos y aseguró que la inflación no llegará al 7.5% hasta fin de año.
Más allá de las críticas contra el doble aguinaldo y las políticas electoralistas, el Gobierno logró nuevamente imponer su agenda política. ANF