Jueves, 2 de enero de 2014
 

OBSERVATORIO

Retorno olímpico a "La Moneda"

Retorno olímpico a "La Moneda"

Demetrio Reynolds.- Por el despojo marítimo, es obvio que no tengamos mucha simpatía por Chile, pero eso no impide reconocer con admiración su solidez institucional sobre la que se asienta la democracia, con todas las características y prerrogativas que le son inherentes.
Un hecho que le hace visible a Chile como un paradigma ejemplar es la alternancia democrática. La transición civilizada entre un partido y otro de signo distinto, es una muestra de madurez. La élite política disputa el poder con hidalguía; gane quien gane; pierda quien pierda, el ganador absoluto es siempre Chile. Los chilenos aman su país por encima de las diferencias ideológicas.
En circunstancias especiales cerró su anterior gestión la Dra. Bachelet. El alto índice de aprobación popular fue un aplauso unánime a su brillante desempeño. No es ni siquiera imaginable que hubiera pasado por su mente la idea de prorrogarse en el cargo, de acomodar a su ambición personal la Carta Magna, como hacen hoy los caudillos del ALBA.
Un azar de la naturaleza le permitió demostrar la estoica consistencia de su carácter. Su salida coincidió con el sismo devastador que arrasó una región de Chile. Allí se la vio serena e incansablemente activa en las labores de socorro a los damnificados. Los periodistas le preguntaron cómo resistía sin lágrimas esa desolación, a lo que la Dra. respondió: “no hay tiempo para llorar”.
Por su profundo respeto a la democracia, por su exitosa gestión presidencial y por su personalidad ejemplar, volverá la doctora a lucir el cetro del poder en La Moneda. En sus primeras declaraciones a los medios ha expresado que emprenderá cambios sustanciales en una serie de aspectos, entre ellos ha mencionado con énfasis la educación, un tema difícil y desafiante que pondrá a prueba su temple y su talento de gobernante.
A nosotros nos interesa de modo particular su posición sobre el problema marítimo. No hay motivo para abrigar esperanzas nuevas; ya conocemos su criterio; lo expresó aun antes de ser otra vez candidata. Sin embargo, un alto funcionario de la cancillería boliviana ha insinuado que se volvería a la agenda de los 13 puntos. Sería una estupidez. El contexto ha cambiado. La Dra. Bachelet no soslayará el problema, pero tampoco modificará la postura conocida: “del mar, lo que quieras Evito, pero sin soberanía. Eso no estaba ni estará en ninguna agenda”. Por tanto, con calma señores, con calma. Hay que pensar antes de hablar. Y con chile, más cuidado.