Martes, 7 de enero de 2014
 

LA NOTICIA DE PERFIL

Los Reyes Magos no vinieron

Los Reyes Magos no vinieron

Paulovich.- Con motivo de la festividad de los Reyes Magos, la Confederación de Yatiris de Bolivia ofreció “una gran fiesta gran” en honor a sus colegas magos del Oriente que acudieron a Belén a adorar al Niño Jesús hace más de 2.000 años.
Mi pariente espiritual se sintió orgullosa al saber que nuestros yatiris fueron colegas de Baltasar, Gaspar y Melchor, y comunicándome que esa noche luciría sus calzones rojos y amarillos me condujo en mi camello motorizado marca Harley Davidson hasta el Naiclú “Malena” en la ciudad de El Alto, a la vueltita del afamado Motel “Devórame Otra Vez”.
Allí fuimos recibidos por los famosos yatiris Calimán, Wayruru y Titirico vestidos de reyes magos y montados en llamas porque en el altiplano no existen camellos ni dromedarios, explicándonos que ellos (los yatiris) pertenecían a la Cancillería del Estado Plurinacional, Multicolor y Folklórico de Bolivia dirigido por el señor David Choquehuanca, colaborador del Gran Yatiri y Mallku Evo Morales Ayma, presidente vitalicio de esta provincia andina.
El baile ofrecido por los yatiris en honor de sus colegas los Reyes Magos fue entusiasta y dadivoso, pues los yatiris obsequiaron a los participantes réplicas en miniatura del avión presidencial y del otro avión adquirido para el vicepresidente Álvaro García Linera y algunos ministros importantes como el ministro de la Presidencia Ramón Quintana, el ministro de Gobierno Carlos Romero, y el dueño del Monedero Luis Arce Catacora.
A mi pareja ocasional Macacha, le regalaron una réplica en miniatura del Banco Central de Bolivia, una verdadera joya arquitectónica de Alasitas. Yo que soy viejo lobo de mar, no acepté ningún obsequio porque podría oler a coima.
Como no llegaban los Reyes Magos, algunos invitados comenzaron a inquietarse pero los yatiris de Choquehuanca tranquilizaron a la concurrencia y comunicaron mediante altavoces que en lugar de los Reyes Magos llegaban al país los embajadores de Bolivia en países del exterior, y de esa manera vimos después de algún tiempo a amigos y excolaboradores de Evo Morales que habían sido premiados con designaciones diplomáticas, jugosos sueldos y otros beneficios. Vimos que algunos habían retornado más gordos y lustrosos.
Mi comadre cochabambina bailó con algunos de ellos y los yatiris principales sacaron a bailar a las funcionarias femeninas que llegaron.
Como entre tragos y amigos suelen contarse algunos secretos, los periodistas piolas como Macacha y yo nos enteramos de que todos los diplomáticos bolivianos habían sido llamados a La Paz con pasajes y viáticos pagados por el Gobierno para controlar los votos de los ciudadanos bolivianos que viven en el exterior y por ahí trascendió que el presidente Morales tiene por lo menos 150 mil votos, que vendrán de fuera para lo que cuenta con eficientes funcionarios diplomáticos, como los que llegaron esa noche de fiesta en vez de los yatiris y Reyes Magos que no pudieron llegar.
Al retornar a La Paz pregunté a mi comadre Macacha si los calzones amarillos y rojos que utilizó le habían traído suerte, y la cholita cochabambina me dijo que periodísticamente nos había ido muy bien.