VIGILIA. Los obreros y transportistas tomaron el campamento de la empresa SIGMA y dicen que no permitirán que nadie saque la maquinaria hasta que paguen salarios y contratos.

LAS OBRAS EN EL CAMINO SUCRE - RAVELO ESTÁN PARALIZADAS

Obreros de Sigma exigen salarios y no hay pagador

Luis Alberto Guevara López

Crítica. Así es la situación de los obreros y transportistas que trabajan para la empresa SIGMA, que construye la carretera asfaltada del tramo Sucre – Ravelo, de la ruta Diagonal Jaime Mendoza. Las obras están paralizadas y todos temen que pronto la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) rescinda contrato con la empresa y se queden sin fuentes de empleo.
Unas 300 personas entre obreros y cocineras no recibieron sus salarios de los meses de noviembre y diciembre, además del aguinaldo, mientras que otros 50 transportistas entre volqueteros, micreros y conductores de cisternas no cobraron ningún dinero por el servicio que prestaron a la empresa. Hay transportistas que no recibieron ningún pago desde hace cinco meses, según los obreros que hacen vigilia en el campamento de Punilla.
Este diario fue hasta ese lugar y ahí encontró a un grupo de unos 20 trabajadores que permanecen cuidando el campamento para evitar que los ejecutivos o dueños de la empresa saquen alguna maquinaria. Ahí mismo estaban tres transportistas; dos con sus volquetas y uno con su micro, parados en la puerta de ingreso.
De hecho, no son los únicos. Los cerca de 350 afectados decidieron organizarse y decidieron conformar grupos para que por turnos ingresen a la vigilia y no dejen sacar ni una sola maquinaria del campamento.


SIN EXPLICACIÓN
Los obreros comentaron que desde antes del 20 de diciembre ellos quisieron contactarse con los ejecutivos de la empresa para saber cuál era el motivo por el que no les cancelaban sus salarios, pero no hay con quién hablar. Prácticamente todos desaparecieron. Hasta hace unos tres días estaba en el campamento el administrador, pero como también es un empleado al igual que ellos, no sabía qué explicación darles. Además, dijeron, él es nuevo y sabe muy poco de lo que está sucediendo con la empresa.
En el campamento todo es silencio. Las máquinas ya no funcionan y los obreros con la desesperación de no tener con qué alimentarse esperan pacientemente a que este problema se solucione pronto. Ellos quieren que les cancelen los dos sueldos retrasados y su aguinaldo.
Para hacer respetar sus derechos se organizaron en un sindicato y ahora su demanda ya está en la Dirección Departamental del Trabajo. Sin embargo, no sólo quieren confiar en esta instancia y por eso tomaron la decisión de no dejar sacar nada del campamento. Al final, creen que esos activos en sus manos pueden servir para cubrir la deuda que tiene la empresa con los trabajadores y transportistas.
Pero eso no es todo. Convencidos de que este problema puede durar varios días no descartaron con bloquear la carretera entre Sucre y Ravelo a partir de mañana, lunes, o asumir otras medidas de presión.


ASAMBLEA GENERAL
Los cerca de 350 obreros y transportistas se reunirán mañana en el campamento de Punilla a partir de las 8:00 y ahí definirán qué acciones tomar. El pasado martes ya bloquearon la calle Bolívar en inmediaciones de la ABC Regional Chuquisaca.
En esa oportunidad, ejecutivos de la ABC explicaron a los trabajadores que como entidad contratante cumplieron con el pago a la empresa por los trabajos ejecutados, por lo que no habría justificaciones para que no se cumpla con el pago de salarios y otras obligaciones.


EL PROYECTO
La empresa SIGMA construye el asfaltado del tramo Sucre – Ravelo de 46,354 kilómetros a un costo de Bs 214.355.677 desde noviembre del año 2009. Inicialmente la obra debió concluir en diciembre de 2011, pero después fue ampliada para el 18 de julio de 2013.
De acuerdo a los obreros faltaría por asfaltar unos 15 kilómetros, construir el puente de Fisculco y otros que están a media ejecución. La maquinaria estuvo trabajando hasta el 20 de diciembre del año pasado y desde entonces no se mueve ni una sola pala.

La empresa

SIGMA es un consorcio de empresas que no pertenecen a Chuquisaca y se sede ahora estaría en la ciudad de Tarija, según los trabajadores que no pueden contactarse con los dueños o ejecutivos.