AGRESIÓN. El hecho ocurrió en noviembre de 2013 en la localidad de Challapata.
TRAS UNA AUDIENCIA EN EL MUNICIPIO DE CHALLAPATA, DEPARTAMENTO DE ORURO
Otorgan libertad a agresor de periodista
Otorgan libertad a agresor de periodista
El periodista Florencio Argandoña fue agredido brutalmente por avasalladores de Challapata que le dejaron lesiones en un ojo
Agencias
El fiscal de Challapata, Mario Rocha, pidió otorgar medidas sustitutivas a la detención preventiva para Tomas C., uno de los acusados de agredir brutalmente e intentar asesinar al periodista de ese municipio, Florencio Argandoña. Este lunes tomará declaración a otro de los sospechosos este lunes.
Durante la audiencia de medidas cautelares, que se llevó adelante el viernes, el sospechoso manifestó que su persona se encontraba tan sólo de paso por el lugar y que, por tanto, era inocente, pero señaló a otro sujeto como el autor de la brutal agresión que conllevó un daño irreparable en el ojo derecho del periodista.
Para el secretario ejecutivo de la Federación de Trabajadores de la Prensa de La Paz (FTPLP), Boris Quisberth, es “de suma importancia que se encuentre y sancione a los culpables de este hecho porque de esta forma se debe sentar un precedente para el respeto a la labor de los trabajadores de medios de comunicación en todo el país”.
Argandoña, periodista del canal municipal, sufrió una golpiza el 14 de noviembre en la localidad de Challapata por parte de presuntos avasalladores que no querían ser identificados cuando efectuaban la ocupación de terrenos que fueron transferidos a la Universidad Técnica de Oruro.
Ese día, Argandoña, conjuntamente un grupo de periodistas a las 16:00, acompañaron a los personeros de la Unidad de Catastro del Gobierno Municipal de Challapata, quienes debían hacer el decomiso de material de construcción en predios municipales, donde había construcciones clandestinas.
"Nosotros, a solicitud de la Unidad de Catastro y como medio de comunicación del municipio de Challapata, acudimos conjuntamente los técnicos de Catastro a las construcciones clandestinas. Cuando llegamos al lugar, había unas 20 personas, quienes son aparentemente propietarios de esas construcciones, quienes se encontraban reunidos", afirmó en ese entonces Argandoña.
Cuando los técnicos comenzaron con el levantamiento del material, se iniciaron las agresiones y el periodista se trasladó detrás de una camioneta para resguardar su integridad y hacer la cobertura. Sin embargo, fue sorprendido por la espalda a golpes, lo agarraron y le arrebataron la cámara filmadora.
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