¿Es o no es verdad?
¿Es o no es verdad?
Juan José Bonifaz B..- Estos días se ha provocado un confuso intercambio de notas y acusaciones, entre el Abogado, Ex Ministro de Estado, Carlos Sánchez Berzaín, y autoridades del gobierno, sobre su libro publicado en EE.UU. bajo el sugerente título de: “La Dictadura del Siglo XXI en Bolivia”, una publicación que lleva en el fondo, interrogantes para el ciudadano consciente en un año electoral.
Del análisis del libro en cuestión, se concluye que los objetivos del Socialismo del Siglo XXI son exactamente lo contrario de los de una Democracia Republicana. Que la América Latina se está dando cuenta que hay que empezar a llamar las cosas por su nombre. Oswaldo Hurtado, ex presidente del Ecuador, planteó la Dictadura del Siglo XXI para el Ecuador; Sánchez Berzaín plantea lo mismo para Bolivia.
El abogado autor, en lo fundamental, afirma que la Dictadura es el gobierno que viola el Estado de Derecho, que es fundado en una CPE, y que nadie puede ponerse por encima de las leyes. Cuando un caudillo o un grupo se ponen por encima de la ley, se acabó la democracia. La CPE de 1977 reformada en 1994 era una constitución reformable por un procedimiento especial, y la reelección estaba prohibida. De ahí que la Reforma Parcial de la CPE fue modificada por la Reforma Total mediante la Asamblea Constituyente, convocada por una Ley que exigía tres requisitos: La aprobación por dos tercios de votos de la A.C; que debería reunirse en Sucre, y la duración de un año. Ninguna de estas condiciones se cumplieron: se buscaron dos tercios “aun de los presentes en la A.C”; Sucre fue sustituida por Oruro, y se amplió el plazo; por tanto, la Asamblea Constituyente, perdió todo su valor legal. (¿?)
En Oruro siguieron las violaciones: una Ley especial con acuerdo de la oposición, la gloriosa Ley 3941, otorgó al Congreso la competencia de adecuar la nueva CPE por dos tercios de votos, y a una Comisión Secreta, para adecuar la CPE que nada tenía que ver con la de Oruro (¿?)
El prestigioso intelectual Carlos Alberto Montaner, en la presentación del referido libro, se refiere a la Democracia Republicana, cuyas características son contrarias al modelo bolivariano del Socialismo del Siglo XXI. A saber: La Democracia Republicana, consiste en: 1) Proteger los derechos individuales y colectivos, y las elecciones son para salvaguardar los derechos de los individuos en un gobierno de leyes e instituciones, no de personas, de grupos y menos de un caudillo. 2) Servirse de elecciones periódicas, para evitar que dinastías, personas o familias pretendan su permanencia en el poder; sino que conforme a una CPE y las leyes, se cumplan los principios del plan de gobierno y una alternancia sana. 3) Establecer la división de poderes. Es decir, fragmentar la autoridad para asegurar la defensa de los derechos. Un poder legislativo que formula leyes, un ejecutivo que administra el Estado conforme a leyes, y un poder judicial, que garantice los derechos ciudadanos y el cumplimiento de la ley.
Pese a que los políticos bolivianos han perdido toda credibilidad, los temas abordados son delicados y nos llaman a preguntar: ¿No será que los plurinacionales nos han vendido gato por liebre?...Si es así, es tiempo de despertar de este sueño hipnótico.
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