TENSIÓN. La protesta de los sindicalizados tuvo tintes de violencia y vandalismo.

ALCALDÍA RATIFICA PUESTA EN MARCHA DE BUSES "PUMAKATARI"

Violenta protesta agrava crisis con choferes paceños

La Paz/Agencias

Violencia, destrozos, excesos y detenidos marcaron ayer el paro movilizado de una facción del transporte paceño que se opone al servicio público de traslado de pasajeros en esa urbe; la disputa tiende a agravarse y el conflicto se radicalizaría en esta jornada, mientras el diálogo no asoma.
Desde temprano, cientos de choferes bloquearon las principales calles de La Paz, aunque la contundencia de su medida se percibió en la Autopista que une esa urbe con El Alto; la protesta de los transportistas, que acaban de subir sus tarifas, despertó la ira de numerosos vecinos, que recibieron las marchas con insultos y pedradas en muchos barrios.
El dirigente Ismael Fernández, anunció que la próxima medida del sector será un paro indefinido. "Si no quiere hablar el alcalde (Luis Revilla) estas movilizaciones van a continuar, vamos a seguir en las calles", advirtió.
Durante las protestas, al menos seis choferes fueron detenidos por la Policía por protagonizar actos violentos como roturas de vidrios en vehículos y mercados, y pugilato con peatones, mientras que los agentes utilizaron gas para dispersar a los movilizados.


PEDIDO DE DIÁLOGO
Por su parte, el Gobierno, a través del ministro de Trabajo, Daniel Santalla, instó a la Alcaldía y a los choferes a dialogar para poner fin al conflicto.
La Alcaldía de La Paz, en manos del opositor Movimiento Sin Miedo (MSM), compró el año pasado 61 autobuses de fabricación china, bautizados como "PumaKatari" y tienen capacidad para transportar, cada uno, a 60 pasajeros. Los choferes creen que la puesta en marcha de este servicio, en febrero próximo, mermará sus ingresos.
Pese a la resistencia de la población paceña, los choferes sindicalizados cercaron la Alcaldía paceña, a mediodía, en medio de un fuerte resguardo policial.
Con petardos, gritos y pancartas, los transportistas emprendieron una marcha por el centro paceño exigiendo la renuncia del alcalde Luis Revilla.
Entretanto, el director de Gobernabilidad del Municipio, Pedro Susz, negó a los movilizados la opción de dialogar con el Alcalde.
Denunció que hubo destrozos y agresiones de los choferes en diferentes zonas de la urbe, como ser en la puerta principal de la sede de la Guardia Municipal, la cual quedó inservible.
La Alcaldía convocó para hoy, martes, a un diálogo a otro bando de los transportistas, encabezados por Julián Manzaneda, a objeto de explicarles temas referidos al Sistema de Transporte.

En la jornada

La intervención de la Policía a las protestas incluyó el uso de gas lacrimógeno.
Vendedoras del Mercado Camacho, afectadas con la protesta, lanzaron amenazas.
La Asamblea de la Paceñidad se reunía anoche para fijar detalles del servicio público.