PROTESTAS. Simpatizantes del presidente sirio Bachar al Asad se congregan en Montreux, Suiza.

DIRIGENTES AFIRMAN QUE NO QUIEREN NEGOCIAR CON GOBIERNO DE ASAD

Ginebra: Oposición siria insiste en crear un gobierno transitorio

Ginebra/EFE

El presidente de la Coalición Nacional Siria (CNFROS), Ahmed Yarba, adelantó ayer que la prioridad de su alianza opositora en las negociaciones con el régimen sirio es el establecimiento de un gobierno transitorio con poderes, incluso sobre los cuerpos militares y de inteligencia.
"La prioridad es la libertad y pedimos la formación de un gobierno transitorio, como dice el Comunicado de Ginebra", un documento acordado por Estados Unidos y Rusia hace año y medio, y que es la base de este proceso de paz.
Yarba compareció por primera vez ante la prensa internacional en Ginebra, donde tienen lugar las negociaciones entre la oposición y el gobierno de Siria –con la mediación del enviado especial de la ONU y la Liga Árabe, Lajdar Brahimi– para intentar poner fin a tres años de guerra civil.


DELEGADO
En la conferencia de prensa, el Presidente de CNFROS anunció que él no dirigirá las negociaciones, sino que delegó en otro miembro de la alianza opositora, que no identificó, esta responsabilidad.
"El equipo negociador está autorizado por mí para manejar estas negociaciones. No es importante quién va a dirigirlas, lo importante es que la Coalición ha decidido venir para cumplir los requisitos del Comunicado (de Ginebra)", dijo Yarba.
El equipo negociador del Gobierno sirio estará encabezado por su ministro de Asuntos Exteriores, Walid Muallem.
El dirigente opositor indicó también que una de las primeras cosas a determinar tiene que ver con el plazo y calendario de estas negociaciones, es decir "el tiempo que nos vamos a dar antes de decidir si van bien".
Durante la introducción que hizo antes de responder a las preguntas de los periodistas, Yarba atacó duramente al régimen, al que calificó de "criminal" y le acusó de usar armas químicas contra aquellos que intentaron oponerse a él y de torturar –utilizando los peores métodos– a quienes considera sus enemigos.
"La máscara del régimen ha caído y ahora ya ni siquiera logra convencer a sus amigos", comentó.
Preguntado sobre el apoyo de Rusia al Gobierno de Damasco, Yarba sostuvo que en una reunión que mantuvo la semana pasada con el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, éste le aseguró que su gobierno "no está aferrado" al de Al Asad y que la solución al conflicto en Siria "debe ser negociada entre los propios sirios".
"El mundo está convencido de que el régimen no puede mantenerse (en el poder), que es parte del pasado. Si Al Asad pudiese seguir dirigiendo Siria, esta conferencia no tendría lugar", declaró el máximo dirigente de la CNFROS.


SEPARADOS
Asimismo, la oposición y el Gobierno de Bachar al Asad no se sentarán en la misma mesa de negociaciones en la primera fase del proceso de paz que tiene lugar en Ginebra, según dijo el dirigente de la alianza opositora, Monzir Akbik.
El mediador de la ONU y de la Liga Árabe para Siria, Lajdar Brahimi, había anunciado que se reuniría por separado con las delegaciones opositora y gubernamental para intentar convencerles de que negociaran directamente, algo que, según Akbik, no consiguió.
"Las delegaciones de la oposición y el régimen no se van a sentar en la misma mesa. Van a estar en salas separadas y no van a hablar directamente, sino a través del mediador Brahimi", afirmó Akbik, miembro de la delegación de la oposición en las negociaciones.
Según dijo, lo primero que se va a discutir es el calendario y los plazos de estas negociaciones, que se estructurarán en diversas fases.

Miles de extranjeros combaten en la guerra civil siria

Al menos 11.000 combatientes extranjeros, de 74 países, actualmente en el frente rebelde de la guerra siria, de los cuales cerca de 2.000 son europeos, según un informe difundido por el diario árabe Sharq al Awsat.
Los extranjeros, que viajan a Siria para sumarse a los grupos yihadistas que luchan con la oposición, participan en los combates, pero también en atentados suicidas, precisa el estudio elaborado por el Centro Internacional de Estudios de Radicalización.
Unos 2.000 combatientes proceden de al menos 15 países europeos, lo que convierte este fenómeno –agrega Sharq al Awsat– en una importante preocupación para los gobiernos occidentales.
Aunque el 80% de los extranjeros que luchan en Siria son árabes y europeos, también se identificaron individuos procedentes del sudeste asiático, norteamérica, Australia y países africanos no árabes.
En total, residentes y ciudadanos de al menos 74 países se unieron a grupos armados en Siria, agrega el informe.
Un mapa realizado tras el estudio refleja que hay 412 combatientes franceses, 366 británicos, 296 belgas, 240 alemanes, 152 holandeses. En cuanto a España, 95 yihadistas habrían viajado a Siria para luchar junto al bando rebelde.
Los cinco países con mayor número de combatientes extranjeros en Siria son de Oriente Medio: Jordania lidera las cifras con 2.089, seguido de Arabia Saudí (1.016), Túnez (970), Líbano (890), y Libia (556).
"Uno de cada nueve combatientes europeos en Siria es probable que cometa atentados una vez regrese a su país de origen", advirtió al diario Noman Benotman, presidente de la Fundación británica Quilliam.
Añadió que se trata de "un hecho peligroso", y explicó que de los cerca de 400 combatientes británicos que hay en Siria, 40 podrían realizar actos terroristas o ataques suicidas cuando vuelvan al Reino Unido.

Facciones

El líder de Al Qaeda, Ayman al Zawahiri, instó ayer a las distintas facciones islamistas y yihadistas que luchan en Siria a que no se enfrenten entre ellas, tras los sangrientos combates que estallaron este mes en el norte de Siria.