INFORMALIDAD. Los precarios puestos de los comerciales en los exteriores del Mercado San Antonio, un problema que provoca desorden en la zona.
LOS INFORMALES EMPEZARON A TOMAR LAS ACERAS Y CALZADAS ADYACENTES AL CENTRO DE ABASTO
Desorden en el Mercado San Antonio
Desorden en el Mercado San Antonio
La construcción del nuevo Mercado San Antonio podría organizar el comercio en la zona
Sucre/CORREO DEL SUR
La falta de autoridad y la primacía de los intereses particulares en la zona del Mercado San Antonio, provocan que el comercio informal se asiente en aceras y calzadas de los alrededores del centro de abasto, un problema que deriva en caos y desorden.
Relativamente nuevo, el Mercado San Antonio se caracteriza por su variada oferta y amplio espacio, sin embargo, por diversos motivos el comercio informal empezó a asentarse en las aceras y calzadas adyacentes al mismo.
En la avenida Martín Cárdenas, frente al mercado, se instalaron puestos de diversa clase: frutas, ferreterías, verduras y gomerías entre otros sin distinción; llama la atención la precariedad de muchos siendo lugares de expendio de comida.
“Nosotros queremos hacernos puestos de ladrillo, pero no nos permiten, la Intendencia del Mercado Campesino nos dicen que no tenemos derecho”, relató Casta Condori, dirigente del Sindicato 2 de abril, que afilia en el sector a cientos de comerciantes instalados ahí hace ocho años.
Son comerciantes que antes vendían sus productos más abajo, en el sector de la parada de buses a Tarabuco. Sus predios son terrenos que supuestamente deberían servir para ensanchar la avenida Martín Cárdenas a doble vía; no obstante afirman que no invaden la acera y que en todo caso sus puestos ocupan un espacio que era usado por la gente para hacer sus necesidades.
Sin considerar la alternativa de ingresar al mercado principal, las comerciantes demandan más bien la construcción de un muro de contención en la calle de arriba, pues en varias ocasiones automóviles por el descuido o estado de ebriedad de sus conductores se precipitaron sobre los puestos.
“Queremos mejorar, pero no nos dejan. Cuánto no quisiéramos mejorar y podríamos vender más. Estamos de acuerdo en tener casetas bien hechas con buenas condiciones”, expresó a su turno Máxima Flores.
Frente a estos puestos se construyeron varias casetas con diferentes dueños que instalaron sus negocios o que incluso los alquilan a terceros. Hace ocho años que la Alcaldía les habilitó el espacio para instalar el comercio, ellos pusieron los materiales, la Comuna terrenos a condición de pagar un sitiaje por el lugar de Bs 1 por día.
Entretanto, en el interior del Mercado San Antonio, las vendedoras manifestaron su molestia por el desorden que empieza a generarse en exteriores por la informalidad de los otros vendedores.
Las vendedoras que tienen puesto al interior del mercado pagan de acuerdo al tipo de venta que tienen, entre 15 y 25 al mes, mientras que los puestos de fuera no pagan nada.
“Nosotras queremos que entren a vender, aquí tenemos espacios, pero ellas no quieren porque los fines de semana venden fácil afuera nosotros aquí estamos toda la semana”, dijo una de las vendedoras que se reservó su identidad.
La misma informalidad favorece el ilícito; según comentaron, el pasado viernes se registró el robo de un cargamento de fruta en el Mercado Campesino y los productos robados posteriormente fueron llevados al Mercado San Antonio para su venta en exteriores, el hecho fue descubierto por los dueños de la mercadería. “En dos autos han intentado escapar a uno lo ha detenido la Policía con la fruta”, relató una de las vendedoras.
La administración no puede hacer nada
PRECARIO. Los puestos de comida.
NUEVO MERCADO, ¿LA SOLUCIÓN?
Por su parte, Consuelo Aguilar, quien fungió como administradora del mercado San Antonio hasta el año pasado y que se encuentra a la espera de confirmar su continuidad en el cargo, comentó que no se trata de un problema de espacio, ni tampoco de oposición de las vendedoras a recibir más gente.
“Tenemos conocimiento de que hay Bs 8 millones inscritos en el Gobierno Municipal para la construcción del nuevo mercado que nos han asegurado será esta gestión, mientras eso se lleva a acabo, el año pasado yo había recibido una instrucción (de la coordinadora de mercados de la Intendencia), de que no se podía admitir más vendedoras pues como se va a construir el mercado, luego no habría dónde sacarles a las vendedoras después”, explicó.
El nuevo mercado se construirá en dos de las tres hectáreas que comprende el actual predio del Mercado San Antonio.
No obstante, las vendedoras dudan que el proyecto se concrete pues es un compromiso que la Alcaldía no cumplió ya la gestión anterior. “Teníamos que salir a la calle en enero para que empiecen a construir el mercado, pero no va a pasar nada”, argumentaron.
Aguilar comentó que el mercado San Antonio cuenta con apenas un comisario municipal cuyas competencias se limitan sólo al área interior no así los exteriores, donde sus esfuerzos por organizar el comercio son casi nulos.
“Yo solito trato de meterles a las ambulantes aquí adentro, pero les dicen que se afilien, esa es la condición”, señaló el comisario que prefirió el anonimato.
Ambos coincidieron en que los comerciantes del exterior no quieren afiliarse al Sindicato del Mercado y cumplir con el pago de tributos.
“Son afiliadas a sindicatos del Mercado Campesino, nosotros tributamos a la Alcaldía, las de afuera no pagan nada, vienen a vender encima lo dejan sucio y se van”, se quejó otra vendedora.
Los actores
Casta Condori
"No nos han dejado mejorar nuestros puestos por eso así nomás estamos vendiendo".
Vendedora
"Queremos que las otras entren a la formalidad, nosotras tributamos, tenemos reglas, hay limpieza, estamos organizadas".
Vendedora
"El comisario hace todo lo posible por meterles pero no hacen caso, y no tenemos ayuda de la administradora".
"No podemos recibirlas porque no hay orden todavía; una vez que tengamos la autorización seguro van a entrar".
Comisario
"Yo solito no puedo hacer nada para organizar a tantos comerciantes afuera que no quieren entrar".
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