Mauricio Soria continúa al mando del equipo académico de Blooming.

Vuelve la calma “celeste”

Santa Cruz / El Deber

Finalmente Mauricio Soria no se va de Blooming y todo vuelve a la normalidad. El técnico cochabambino, que el miércoles se había despedido de sus jugadores, ayer volvió al trabajo como si nada. Antes, se reunió con el presidente Erwin Peredo y algunos dirigentes del club para expresar el motivo de su molestia y lograr el compromiso de pago a la gente que lo colabora en su trabajo, además de algunas solicitudes que son más de apoyo logístico que otra cosa.
Soria estaba molesto porque problemas pequeños eran una especie de freno de mano para el equipo de trabajo que llegó con él. Se hizo una autocrítica y la dirigencia se comprometió a ajustar hasta el más mínimo detalle para que el técnico y los jugadores se entrenen tranquilos.
La práctica matinal comenzó temprano y se la hizo a puertas cerradas. El Presidente, a tanta insistencia, se detuvo un par de minutos para explicar que todo se arregló pacíficamente en la reunión, minimizando la crisis que el miércoles movilizó al directorio. Igual, el técnico terminó admitiendo que estaba molesto porque no le cumplieron algunos puntos acordados al momento de aceptar la propuesta.