Viernes, 25 de abril de 2014
 

TENSIÓN. Manifestantes prorrusos vigilan desde un punto de control en Krasnyi Liman.
TENSIÓN. Manifestantes prorrusos vigilan desde un punto de control en Krasnyi Liman.

ORDENA MANIOBRAS MILITARES TÁCTICAS

Rusia moviliza sus tropas en frontera con Ucrania

Rusia moviliza sus tropas en frontera con Ucrania



La operación "antiterrorista" ucraniana deja un saldo de cinco militantes prorrusos muertos en la localidad de Slaviansk

Moscú, Kiev/EFE

El ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigu, anunció ayer el inicio de maniobras militares en la frontera con Ucrania y advirtió de que "la maquinaria militar" que desplegó Kiev en la localidad de Slaviansk debe ser parada para evitar "una gran cantidad de muertos y heridos".
"Nos vemos obligados a reaccionar ante este desarrollo de la situación. A partir de hoy (ayer), iniciamos maniobras de batallones tácticos (...) en las zonas fronterizas con Ucrania", dijo el Ministro ruso.
Efectivos de las distintas ramas de las Fuerzas Armadas rusas "ensayan marchas y despliegues para cumplir misiones", mientras que la aviación se prepara para realizar vuelos dirigidos a ensayar "acciones en las cercanías de la frontera estatal", señaló.
Nada más emitido el anuncio, varios videos con columnas de blindados rusos dirigiéndose hacia la frontera ucraniana inundaron internet.
En las imágenes difundidas en youtube.com se puede ver el avance de alrededor de 30 blindados con banderas rusas por una carretera de la ciudad de Novoshájtinsk, próxima a la región ucraniana de Lugansk.


CARROS BLINDADOS
Según el portal ucraniano tsn.ua, se trata de blindados de transporte de infantería BTR-80 y BTR 82-A, así como de cañones autopropulsados tipo Nona-SVK 2S23.
"El reparto de fuerzas no es justo. Ya se ha dado orden para emplear las armas contra la población civil. Si no paramos ahora esta maquinaria bélica, habrá muchos muertos y heridos", subrayó Shoigu en una reunión ministerial.
El Ministro aseguró que 11.000 soldados ucranianos, apoyados por la aviación, 160 tanques y más de 230 blindados de infantería, participan en una operación lanzada contra "poco más de 2.000 personas integradas en grupos de autodefensa en el sureste de Ucrania y armados con unos 100 fusiles".
"Unidades de la Guardia Nacional y batallones de extremistas del 'Sector de Derechas' actúan contra la población civil. La población civil es reprimida por unidades especiales del Servicio de Seguridad de Ucrania y del Ministerio de Interior, desplazados a (las regiones ucranianas) de Donetsk y Lugansk", afirmó Shoigu.
Al mismo tiempo, las autoridades rusas condenaron ayer tajantemente la decisión del presidente interino de Ucrania, Alexander Turchínov, de reanudar la "operación antiterrorista" suspendida durante las festividades de Pascua.
El presidente ruso, Vladímir Putin, advirtió a las autoridades de Ucrania de que las operaciones punitivas contra la población en el sureste del país tendrán consecuencias tanto para los que las ordenaron como para las relaciones bilaterales ruso-ucranianas.
"La operación punitiva tendrá desde luego consecuencias para la gente que ha tomado esa decisión, y también para las relaciones entre los dos Estados", dijo el jefe del Kremlin.
Mientras, el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, denunció que Rusia no dio"ni un solo paso" para cumplir el acuerdo diplomático sobre Ucrania alcanzado en Ginebra y advirtió que "se está acabando el tiempo" para que Moscú "cambie el rumbo" y que Washington "está preparado" para imponer más sanciones.

Mueren cinco milicianos prorrusos

Cinco milicianos murieron ayer en enfrentamientos armados con tropas ucranianas en Slaviansk durante la operación especial lanzada por Kiev para recuperar el control de esa ciudad, convertida en el bastión de la sublevación prorrusa en el sureste de Ucrania.
Al menos dos columnas de carros blindados con soldados de elite ucranianos avanzaron a mediodía sobre la rebelde ciudad y destruyeron tres de los puestos de control levantados por los milicianos prorrusos en todos los accesos rodados a la localidad.
Los militares abatieron en combate a cinco milicianos antes de que éstos retrocedieran al interior de la ciudad, donde un nutrido grupo de hombres armados con fusiles de asalto Kalashnikov ocupan desde hace 11 días varios edificios oficiales y ejercen un control absoluto sobre la localidad.
Las fuerzas armadas ucranianas rehusaron perseguir a los prorrusos, llamados despectivamente como "hombrecillos verdes" por los medios ucranianos por sus uniformes de camuflaje, y rodearon con sus blindados prácticamente toda la localidad.