PROTESTAS. Continúan las manifestaciones contra actos de violencia contra las mujeres.

PARA EVITAR ACTOS DE VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES

Defensor ve fracaso en aplicación de la ley 348

A un año de la vigencia de la ley 348 para garantizar a las mujeres una vida libre de violencia, el Defensor del Pueblo, Rolando Villena, manifestó que se fracasó en la aplicación y se está desvaneciendo el optimismo de que con esta norma disminuirán las cifras alarmantes de violencia y se sancionará a los responsables.
Villena identificó varios problemas en la aplicación porque hay vacíos en la norma, carencia de infraestructura, falta de personal especializado, falta de recursos, ausencia de reglamento, lentitud y burocracia en los procesos, revictimización y acumulación de carga procesal, lo cual, parece "señalar que su promulgación no incluía un real interés por su implementación concreta”, aseguró.
El Defensor, que fue invitado al taller “Diálogo Institucional de Cumplimiento de la Ley 348” organizado por la Red contra la Violencia hacia las Mujeres, y al que asistieron autoridades y representantes de instituciones departamentales, municipales, policiales, judiciales y de organizaciones sociales, dijo que es imperativo que como sociedad se asuma la enorme responsabilidad y el desafío de enfrentar este problema desde sus raíces.


ACEPTAR FRACASO
Por eso, planteó asumir la gravedad del problema de la violencia hacia las mujeres, aceptar que hay un fracaso en esta lucha; “dejar de lado el autoengaño y ponernos de acuerdo entre todas las instituciones vinculadas a este tema para trabajar de forma integral, coordinada y permanente”, manifestó Villena al evaluar la implementación de dicha normativa.
En su criterio, no son suficientes las campañas de sensibilización e información, sino se debe encarar el problema desde las costumbres y los hábitos cotidianos, implementar políticas claras y efectivas en las escuelas, las oficinas, los espacios públicos y en todos los ámbitos donde se siembra y germina la violencia hacia la mujer.
“Enfrentar también la violencia simbólica en el lenguaje; que se evidencia en los medios de comunicación, las expresiones de nuestras autoridades y líderes de opinión, la publicidad, la información e incluso los mensajes que transmiten nuestras fiestas”, acotó. Erbol