UNIÓN. Los ríos Pilcomayo (izquierda) y Ñucchu (derecha) se juntan en la comunidad de Tasa Pampa, municipio de Yotala.
PRODUCCIÓN. De una veintena de poblaciones chuquisaqueñas asentadas en la ribera del río Pilcomayo, sólo Tasa Pampa se declara libre de contaminación.
LA GOBERNACIÓN PRESENTÓ INFORME QUÍMICO Y TOMÓ NUEVAS MUESTRAS DEL RÍO PILCOMAYO
Analizan grado de contaminación y acciones legales contra ingenio
Analizan grado de contaminación y acciones legales contra ingenio
La lama del dique se derramó en unos cinco kilómetros y el agua llegó al río Pilcomayo
César Vale
Hace un par de semanas, los pobladores de Tasa Pampa, cuya comunidad se encuentra en la intersección de los ríos Pilcomayo y Ñucchu, notaron cómo el primer río cambió de coloración a un tono plomizo más intenso. La Gobernación de Chuquisaca tiene los primeros indicios de que hubo contaminación por el derrame de residuos de la empresa minera Santiago Apóstol, por lo que analiza acciones legales en su contra.
“El agua era clara, pero de repente, ha cambiado de color, y luego nos hemos enterado que se había roto un dique de colas. Estamos muy preocupados sobre todo por las comunidades que están más abajo, ya que nosotros, gracias a Dios, regamos nuestros sembradíos con agua del río Ñucchu”, señaló el dirigente de la comunidad de Tasa Pampa, Javier Cartagena.
En esta comunidad, distante a 14 kilómetros del Puente Sucre y unos 60 de Sucre, donde se juntan los ríos Pilcomayo y Ñucchu, la Jefatura de Epidemiología del Servicio Departamental de Salud (SEDES) Chuquisaca, ayer por la tarde, tomó muestras del agua de ambos ríos para analizarlas en laboratorio.
En la prueba de PH, medida de acidez o alcalinidad, que se realizó en el centro de salud de Tasa Pampa se concluyó que el agua del río Pilcomayo es 10% más ácida que el agua del río Ñucchu.
“El agua del Pilcomayo al ser un 10% más ácida que el de Ñucchu nos da indicios de que está contaminada con las colas de la actividad mineralógica”, manifestó el jefe de Epidemiología del SEDES, Jhonny Camacho, al señalar que ninguna de las dos aguas es apta para el consumo humano.
Sin embargo, ambas muestras serán analizadas en laboratorio para determinar la cantidad de metales pesados que puede contener como zinc, plomo, arsenio y mercurio, entre otros dañinos para la salud.
“Si estuvieran con altos índices de contaminación trae como consecuencia algunas alteraciones de la salud, especialmente el sistema gastrointestinal, con diarreas, vómitos, intoxicación hepática y problemas en la piel por exposición permanente, pero la más importante la exposición crónica y permanente que puede haber y los que sufren obviamente son los que viven en las comunidades ubicadas en la ribera del Pilcomayo”, manifestó Camacho.
Señaló que al haber mucha y permanente exposición, por ejemplo, al arsenio, las afecciones puede tener consecuencias aún más graves como abortos espontáneos, malformaciones congénitas y otras enfermedades neurológicas como retraso mental.
ESTUDIO DE LABORATORIO
La Gobernación de Chuquisaca, ayer, en una conferencia de prensa, presentó un informe de laboratorio elaborado por la Secretaría de Medio Ambiente y Madre Tierra con muestras tomadas en pasados días en otro sector del río Pilcomayo, con los que demostró que hay un alto nivel de contaminación a consecuencia de la rotura del dique de cola de la empresa minera Santiago Apóstol ubicada en la comunidad Canutillo, del municipio de Tacobamba, Potosí.
En los datos obtenidos, por ejemplo, el nivel de turbidez habría superado en un 1.940%, ya que el límite permisible es 5 mg/1 y la muestra arrojó 102. Lo mismo sucedió con las muestras de sodio, hierro, manganeso y cromo, según se refleja en el cuadro.
El sifonamiento del dique que se habría producido el 4 de julio, aunque recién fue reportado varios días después, derramó lama en casi cinco kilómetros de distancia de la quebrada que da hacia el río Pilcomayo, sin embargo, el agua abarcó decenas de kilómetros afectando a 26 comunidades de nueve municipios de Chuquisaca, además de otras poblaciones de Potosí y Tarija que están ubicadas en la misma ribera del río.
El jefe de Gabinete de la Gobernación de Chuquisaca, Everth Almendras, dijo que el gobernador Esteban Urquizu instruyó que a través del Departamento Jurídico se analice la posibilidad de iniciar acciones legales contra los responsables de la contaminación y que se conforme una comisión mixta entre la Secretaría de Medio Ambiente y el SEDES para trabajar en un plan de contingencia, la cual se reunirá hoy.
Mientras tanto, en la Villa Imperial, el jefe de la Unidad de Medio Ambiente de la Gobernación de Potosí, Rolando Aguilar, reveló que la empresa minera Apóstol Santiago realiza su trabajo sin licencia medioambiental por aproximadamente ocho años. “La empresa no cuenta con licencia ambiental para comenzar”, dijo a Erbol al afirmar que suspendió su actividad y comenzó el trabajo de mitigación.
El fiscal de la provincia Cornelio Saavedra, José Luis Ríos, abrió de oficio un proceso penal en contra del representante legal, Mario Cano. Según Erbol, constató que, tres semanas antes, autoridades municipales le habían advertido a la empresa que el dique no reunía las condiciones de seguridad.
Antecedente
Durante el fin de semana, una comitiva interinstitucional de Chuquisaca se trasladó hasta la planta de concentración de minerales de la empresa Santiago Apóstol, en el municipio de Tacobamba, Potosí donde constató que hubo derrame de lama en unos cinco kilómetros.
Parámetros Químicos mg/1
Componente Dato obtenido Límite permisible % con el que sobrepasa
Turbiedad 102 5 1.940%
Sodio 350 200 75%
Hierro 0,5 0,3 66,7%
Manganeso 0,2 0,1 100%
Cromo 0,06 0,05 20%
|