Sábado, 19 de julio de 2014
 

RESCATE. Un rebelde ucraniano observa los restos del avión de Malasyan Airlines durante el rescate de los cuerpos de las víctimas.
RESCATE. Un rebelde ucraniano observa los restos del avión de Malasyan Airlines durante el rescate de los cuerpos de las víctimas.

DERRIBO DE AVIÓN EN UCRANIA DESATA TORMENTA INTERNACIONAL

La ONU pide investigación y EEUU achaca a rebeldes

La ONU pide investigación y EEUU achaca a rebeldes



Rusia y la IATA dicen que Ucrania debió garantizar seguridad aérea en su espacio

Nueva Yiork/EFE

El Consejo de Seguridad de la ONU pidió ayer una investigación independiente para aclarar el siniestro en Ucrania del avión MH17 de Malaysian Airlines, mientras que EEUU lo achacó a un misil de los rebeldes prorrusos aunque no presentó por el momento pruebas que sustenten esa hipótesis.
El máximo órgano de decisión de Naciones Unidas demandó además a todas las partes del conflicto ucraniano que ofrezcan acceso inmediato a la zona del suceso.
La embajadora estadounidense en la ONU, Samantha Power, afirmó ante el Consejo que, según la información de la que dispone su país, el avión "fue probablemente derribado por un misil tierra-aire, un SA-11, operado desde una zona controlada por separatistas en el este de Ucrania".
Poco después el presidente de EEUU, Barack Obama, recalcó que "las pruebas indican que el avión fue derribado por un misil tierra-aire que fue lanzado desde un área controlada por los separatistas respaldados por Rusia dentro de Ucrania".
No obstante, subrayó que es "demasiado pronto para saber las intenciones de quienes dispararon el misil" y evitó culpar directamente al presidente ruso, Vladímir Putin.
"Tenemos pruebas muy sólidas de que el avión fue derribado por un misil SA-11, disparado desde una posición controlada por separatistas prorrusos, probablemente desde el lado ucraniano de la frontera", afirmó por su parte en rueda de prensa el portavoz de Pentágono, el contraalmirante John Kirby.
El portavoz militar no quiso aventurar, hasta que avance la investigación internacional a la que EE.UU. ofreció ayuda, quién fue el responsable directo del lanzamiento del misil. "No sabemos qué unidad, si fue rusa o separatista; no podemos decir si hubo asistencia del otro lado de la frontera, por esta razón hay una investigación en marcha", agregó.
Por su parte Rusia responsabilizó a las autoridades ucranianas por no haber cerrado el espacio aéreo en una zona de combate.
"Cualquier persona normal se planteará por qué los controladores aéreos ucranianos han mandado a un avión a una zona de combate, una zona donde la aviación se utiliza para ataques, sobre todo contra objetivos civiles, y donde hay en funcionamiento sistemas de defensa antiaérea", dijo el embajador ruso en la ONU, Vitaly Churkin.
Churkin subrayó que, según la legislación internacional, es responsabilidad de las autoridades nacionales garantizar la seguridad de los aviones civiles que sobrevuelan su espacio aéreo y pidió por ello una investigación sobre la gestión de Ucrania.
La Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA) indicó en un comunicado que "las compañías aéreas dependen de los gobiernos y de las autoridades de control aéreo para avisarlas qué espacio aéreo está disponible para volar, y ellas se organizan en función de esos límites".
"Es muy parecido a conducir un coche. Si la carretera está abierta, asumes que es segura. Si está cerrada, buscas una ruta alternativa", afirmó el director general y ejecutivo de la IATA, Tony Tyler.

Reacción de Holanda

Mark Rutte, primer ministro de Holanda –país que sufrió las más duras consecuencias de la tragedia con 189 muertos– aseguró que "no descansará" hasta que los responsables del siniestro sean juzgados.