Sábado, 26 de julio de 2014
 

Deco (d) celebra junto a su ex compañeros Eto’o y Messi.
Deco (d) celebra junto a su ex compañeros Eto’o y Messi.

Messi y Eto’o despiden a Deco

Messi y Eto’o despiden a Deco

Lisboa / EFE

El centrocampista brasileño Deco se despidió ayer del fútbol con un partido de homenaje entre el Oporto de 2004 y el Barcelona de 2006, los dos equipos que marcaron su carrera en Europa y con los que ganó la Liga de Campeones.
El amistoso, sin apenas ritmo de juego y de un cariz marcadamente emotivo, terminó en empate a cuatro goles, una fiesta en la que se colaron del lado azulgrana el argentino Lionel Messi y el camerunés Eto’o, que salieron en la segunda parte y dieron pequeñas muestras de su calidad con sus goles y asistencias.
Casi 50.000 personas llenaron las gradas del estadio Do Dragao (se agotaron de hecho las entradas) para decir adiós en el césped a Deco, clave en el equipo entrenado por José Mourinho que hace una década logró la segunda “orejona” para el club luso y fundamental en el esquema de Rikjaard para alzarse con la Champions al servicio de los azulgrana.
Los onces de ambos equipos estuvieron plagados de “viejas glorias” que, pese a su mermada condición física, mostraron que aún conservan magia en las botas.
El propio Deco, de 36 años, fue prueba de ello. En el último minuto hizo el 4-4 definitivo con un remate de volea con el interior del pie que elevó por encima del portero, golpeó el larguero y besó la red, lo que dio paso a la mayor ovación de la noche.
Durante los 90 minutos se interrumpió varias veces el encuentro para ver los vídeos enviados por amigos y compañeros del ya ex futbolista, como el entrenador del Chelsea José Mourinho (estaba prevista inicialmente su asistencia), Luís Figo o Roberto Carlos, que le dedicaron unas palabras.