Domingo, 27 de julio de 2014
 

Tragedia. Los restos del avión de Malaysia siniestrado al este de Ucrania, donde fallecieron sus 298 ocupantes.
Tragedia. Los restos del avión de Malaysia siniestrado al este de Ucrania, donde fallecieron sus 298 ocupantes.

LAS VÍCTIMAS SUPERAN AL TOTAL DE FALLECIDOS EN 2012 Y 2013

En siete meses, 761 vidas fueron segadas por accidentes aéreos

En siete meses, 761 vidas fueron segadas por accidentes aéreos



2014 se perfila como un mal año para la aviación civil en todo el mundo

Agencias

Junto con el ascensor, el avión es el medio de transporte más seguro que existe. Sin embargo, con tres catástrofes en una semana y 761 fallecidos en lo que va del año, 2014 se presenta como un período negro para el transporte aéreo civil en el mundo. El número de muertos, de hecho, supera a la suma de 2013 y 2012 (740 muertos entre los dos años), según cifras de la organización Aviation Safety Network.
Todo comenzó el pasado 8 de marzo, cuando el vuelo MH 370 de la aerolínea Malaysia que viajaba rumbo a Beijing, con 12 tripulantes y 227 pasajeros (153 chinos) desapareció de las pantallas de radar. En este caso, los expertos estiman que el avión cayó al mar en el sur del océano Índico, pero aún no se ha encontrado algún resto, pese a las operaciones de búsqueda.


SEMANA DE TRAGEDIA
Poco más de cuatro meses después, un Boeing 777, nuevamente de Malaysia Airlines, que cubría el trayecto Ámsterdam-Kuala Lumpur, cayó cerca de Donetsk, al este de Ucrania, matando a sus 298 ocupantes, derribado por un misil, supuestamente lanzado por los rebeldes prorrusos, según inteligencia de Occidente.
Sólo seis días después, un avión de la compañía taiwanesa TransAsia Airways se estrelló, en un día de mal tiempo, en la isla de Penghu, a la altura de la costa occidental de Taiwán, falleciendo 48 personas. Y al día siguiente, el pasado jueves, un avión de Air Algerie con 116 personas a bordo, que iba desde Burkina Faso a Argelia, se estrelló en Mali.


AUMENTAN LAS PROBABILIDADES. Según la Asociación de Transporte Aéreo Internacional, menos de uno en dos millones de vuelos el año pasado terminaron en un accidente en que el avión se dañó sin que pudiera ser reparado. Eso, tomando en cuenta los aviones de carga y los charter.
“Una de las cosas que me hace sentir mejor cuando miramos a estos eventos es que si todos ellos fueran el mismo tipo de evento o la misma causa, entonces diría que existe un problema sistemático aquí, pero cada evento es único”, dijo al diario The Daily Telegraph, Jon Beatty, director ejecutivo de la Fundación Seguridad de Vuelo. “Este grupo de desastres aéreos es un recordatorio que es probable que los accidentes de aviones aumenten, porque la industria está creciendo, especialmente en los países en vías de desarrollo”, añadió.
Para el analista de industria de aviación Robert W. Mann Jr., la industria aérea aún opera con una tasa pequeña de accidentes estadísticamente. “La industria enfrenta una falta de honestidad y confianza. Las aerolíneas tienen que reconocer que no pueden confiar más en las autoridades, en las agencias o en la Aviación Civil Internacional (OACI) para evaluar de forma precisa y a tiempo la información de seguridad, para proteger a sus consumidores, tripulación, accionistas y activos”, dijo Mann Jr., al diario La Tercera.

Holanda cierra una semana negra

El último avión procedente de Jarkov (Ucrania) con restos humanos llegó ayer al aeropuerto de Eindhoven, donde una ceremonia cerró una semana negra para Holanda, que perdió al menos a 193 compatriotas en el vuelo de Malaysia Airlines MH17.
El Hércules holandés y el Boeing australiano que portaban algunos de los últimos restos pendientes de trasladar aterrizaron en Eindhoven, desde donde los restos fueron transportados por carretera hasta la base de Hilversum, donde un equipo de especialistas forenses de Holanda y otros países realizará la identificación de los cuerpos, una tarea que puede demorarse durante semanas o meses.
Las dos aeronaves militares de Holanda y Australia, los dos países con más víctimas entre los 298 ocupantes del avión muertos en la tragedia aérea ocurrida el 17 de julio, comenzaron el pasado miércoles a transportar los restos desde el aeropuerto de Járkov, bajo control de Ucrania.