SECTOR. La marcha nacional del sector realizada el lunes, en la ciudad de Oruro.

EL SECTOR SE REUNIÓ EN ORURO Y RATIFICÓ SU RECHAZO AL DS 28761

Ropavejeros alistan marcha y desconocen a su dirigente

Erbol y CORREO DEL SUR

Vendedores y representantes de ropa usada del país, reunidos en un congreso nacional en Oruro, cerraron filas en torno a la libre importación y comercialización de prendería a medio uso. Además, decidieron desconocer a su dirigente Liz Apaza.
La organización anunció que una de sus medidas de presión exigiendo la abrogación de ese decreto supremo, será la realización de una marcha nacional que llegará hasta la sede de Gobierno.
“Es nuestra fuente de trabajo y por eso lo estamos defendiendo, y ahora más que nunca con esta marcha nacional que vamos a tener hacia La Paz”, señaló Gloria Vásquez, representante de base de Potosí.
Franco Lima, representante de base de Santa Cruz, por su parte, indicó que la población compra sus productos y que buscarán estrategias para lograr que el Gobierno anule la prohibición de esa mercadería.


SIN TARIJA
Una dirigente nacional, que pidió no revelar su identidad, consultada por este medio, informó que del congreso nacional del sector participaron ocho de las nueve federaciones.
No asistió Tarija porque su máxima dirigente Liz Apaza, que además era ejecutiva del Comité Nacional de Ropa y Prendería a Medio Uso, fue desconocida porque no habría representado correctamente los intereses del sector.
“La dirigencia nacional ya no está a cargo de Tarija, se la desconoció (a Apaza) por traición, no planteó nuestras resoluciones emitidas en Sucre (en abril pasado) y tomó decisiones unilaterales que los nueve departamento no estaban de acuerdo”, afirmó la fuente.
Este diario no pudo conocer la versión de Apaza porque su teléfono celular estaba apagado.
Respecto a las medidas de presión, sostuvo que el sector sigue en estado de emergencia y hasta el lunes próximo definirá cuándo realiza la marcha nacional.
Además, dieron por cerrado el diálogo con el Gobierno, que rechazó el pedido del sector, por lo que a partir de ahora se abocarán a trabajar su estrategia de lucha.
En abril, los comerciantes habían expresado su predisposición a dejar de vender ropa a medio uso si el Gobierno legalizaba su actividad, como vendedores de “ropa de retorno” (no usada) importada de otros países.
Actualmente se estima que alrededor de 300 mil familias se dedican a esta actividad, los comerciantes señalan que venden ropa usada porque en el país no existen fuentes de trabajo.

Pedido del sector

El sector pide la abrogación del decreto supremo 28761, que prohíbe la importación de prendería usada, además de la comercialización en territorio nacional.