FUERA DE NORMA. La construcción se levanta en pleno centro histórico patrimonial.

CONSTRUCCIÓN EN LA ESQUINA DE LAS CALLES LOA Y AYACUCHO

Dueño de casa desoye notificación; el daño contra el patrimonio sigue

Luis Alberto Guevara

Ni tres notificaciones casi continuas fueron suficientes para paralizar una construcción en la esquina de las calles Ayacucho y Loa, que rompe sin ninguna consideración el entorno colonial que lo rodea.
La Dirección de Patrimonio Histórico de la Alcaldía de Sucre alista multas en contra del propietario, pero una demolición por acción directa de la entidad pública está lejos, debido a que antes se debe encarar un proceso judicial que podría durar no sólo meses sino años.
En tanto, la estructura de hormigón y ladrillo que ya está por el séptimo y en el mismo espacio de una vivienda colonial catalogada en la categoría B, además rodeada de otras casas con similares características, rompe el estilo que le dio a la ciudad de Sucre el título de Patrimonio Cultural de la Humanidad.
El técnico de Patrimonio Histórico del Área de Control Urbano de la Alcaldía de Sucre, Dennis Garrón, informó que el 4 de agosto recibieron la denuncia de una construcción irregular en la esquina de las calles Loa y Ayacucho e inmediatamente notificaron la paralización de la obra al propietario Rolando Reynaga.
Dijo que ingresaron a la construcción y observaron que estaban levantando una edificación en un espacio que, de acuerdo a la ficha de catalogación del inmueble, no está permitido según el reglamento de Patrimonio Histórico.
Luego, el propietario se apersonó por la oficina de Patrimonio Histórico junto a su arquitecto para indicar que regularizaría la construcción con la presentación de los planos.
Sin embargo, la obra continuó y nuevamente Patrimonio Histórico, el 11 de agosto, tuvo que colocar un segundo precinto en el que se notificaba la paralización de obras, manifestó Garrón.
En esa acción se presentó el propietario para informar que sólo estaba realizando obras en casa del vecino, pero era evidente que en ese tiempo la obra había avanzado mucho más.
Empero, las dos notificaciones fueron pasadas por alto y el 14 de agosto se procedió con la tercera notificación. En esa oportunidad, según el funcionario público, el propietario volvió a presentarse en Patrimonio Histórico indicando que harán “todo lo posible” para adecuarse a las normas para que la construcción sea aprobada.
Reynaga dijo que luego de dos días de la notificación realizada, constataron que la obra estaba paralizada, pero este diario observó ayer, jueves, que los obreros continuaban trabajando.
De hecho, el propietario no hizo caso a ninguna a las notificaciones y por ello ya pesa en su contra multas de Bs 2.000, 4.000 y 6.000, correspondientes a la primera, segunda y tercera notificación.


EN ESPERA
DE UNA DEMOLICIÓN
El jefe de Conservación y Revitalización de la Dirección de Patrimonio Histórico de la Alcaldía de Sucre, Guillermo Ossio, informó que la construcción clandestina es de 572 metros cuadrados aproximadamente. En función a la superficie edificada, se calculará la multa que, se estimó, sobrepasará los Bs 100.000.
Cabe hacer notar, dijo, la cancelación de esta sanción no regulariza la construcción clandestina, pues la multa es por la agresión al patrimonio histórico. Explicó que la sanción podría disminuirse siempre y cuando el propietario presente un proyecto que se adecue a la norma y los excedentes tengan que demolerse.
Aclaró que la demolición debe estar a cargo del propietario o en su caso el Gobierno Municipal, pero el que tendría que pagar los costos sería el dueño.
Sin embargo, Ossio dijo que esa acción no puede ser tomada directamente por la Alcaldía porque antes necesitan una orden judicial para el ingreso al inmueble, lo que representa un “gran impedimento”.
Para superar este problema, está en plena construcción una ley municipal de patrimonio de la ciudad de Sucre y en ella se considera que la Municipalidad pueda ingresar a la vivienda con su maquinaria y personal a demoler las agresiones al patrimonio histórico.
Así, se tiene la esperanza de que este caso se revierta con la demolición de los últimos niveles que están fuera de norma. “Es un atentado y un daño que se hace a la colectividad”, señaló Ossio.
Mientras se espera la aprobación de una ley municipal, Patrimonio Histórico abrirá un proceso en las instancias judiciales correspondientes, manifestó.

Notificaciones

La construcción fue paralizada por la Municipalidad en tres ocasiones con el colocado de precintos, pero el dueño de la vivienda continuó la obra hasta llegar a los siete pisos en pleno centro patrimonial histórico.