VOTACIÓN. La jornada electoral transcurrió en calma en Brasil.
LA MANDATARIA BRASILEÑA LOGRÓ EL 41.58% DE LOS VOTOS FRENTE AL 33.56% DEL OPOSITOR SOCIALDEMÓCRATA
Dilma Rousseff y Aécio Neves van a la segunda vuelta en el Brasil
Dilma Rousseff y Aécio Neves van a la segunda vuelta en el Brasil
142 millones de brasileños están llamados a votar nuevamente el 26 de octubre
Brasil/Agencias
La mandataria brasileña y candidata a la reelección por el Partido de los Trabajadores (PT), Dilma Rousseff, y el líder opositor Aécio Neves disputarán la segunda vuelta en las elecciones presidenciales, según el recuento oficial de las elecciones en Brasil.
La presidenta Dilma Rousseff deberá esperar tres semanas para saber si renovará su mandato como presidenta de Brasil. En unas elecciones cargadas de incertidumbre, la Mandataria conquistó el 41.58% de los votos, según el Tribunal Superior Electoral de Brasil (TSE), que escrutó más del 99% de los votos, por lo que deberá ir a balotaje frente al candidato del Partido de la Social Democracia de Brasil (PSDB), Aécio Neves, que sorprendió al quedar sólo a siete puntos por debajo de la Mandataria.
El economista de centro-derecha quedó finalmente en segundo lugar (33.56%), muy cómodo en comparación con Marina Silva, del Partido Socialista de Brasil (PSB), que obtuvo el 21.29% de los sufragios, un número similar al que había conseguido en las elecciones de 2010, en las que también quedó tercera.
Cuando Silva entró en la campaña en agosto, después de la muerte del candidato del PSB, Eduardo Campos, por un accidente aéreo, se instaló en el segundo lugar en intención de voto, que hasta ese momento ocupaba Neves. Sin embargo, en los últimos días, la ecologista comenzó a perder fuerza y ayer las últimas encuestas volvían a ubicar al economista en una segunda vuelta.
Muy lejos quedaron los ocho candidatos que también intentaron, sin éxito, llegar al Palacio del Planalto. La izquierdista Luciana Genro, del Partido Socialismo y Libertad (PSOL), quedó con un 1.6 %, mientras que los otros siete, con menos del 1%.
Neves, del Partido de la Social Democracia Brasileña, es el ex gobernador del estado de Minas Gerais, el segundo más poblado del país. Descendiente de una familia de políticos, es nieto de Tancredo Neves, el primer presidente electo tras el régimen militar que murió sorpresivamente un día antes de su toma de posesión. El economista propone una mayor apertura al capital privado, la autonomía del Banco Central y la búsqueda de más acuerdos bilaterales con Europa y Estados Unidos.
LAS REPERCUSIONES
"Este es un mensaje que dice que yo debo seguir adelante, que yo debo seguir estando aquí", afirmó Rousseff tras agradecer al pueblo brasileño
Se mostró satisfecha y recalcó que "la lucha continúa y será victoriosa". "Una vez más el pueblo brasileño ha honrado al darme esta victoria en esta primera vuelta (...) en nuestra trayectoria es la séptima victoria", dijo Rousseff en rueda prensa tras conocer los resultados electorales presentados por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) por haber avanzado a segunda vuelta.
Por su parte, Aécio Neves invitó a los partidos derrotados a apoyar su candidatura en la segunda vuelta. "Todos los que puedan dar contribución son bienvenidos. El nuestro no es un proyecto de un partido sino de todos los brasileños que quieren ver al país crecer", afirmó.
"Confío en la unión con todos los partidos que creen en el cambio. Nuestro proyecto es generoso. Todos los que quieran sumarse son bienvenidos", agregó.
Algunos datos
Los ex futbolistas Romario de Souza y Bebeto se aseguran un lugar en el Congreso.
El partido de Rousseff gobernará por primera vez el estado de Minas Gerais.
El actual gobernador de Río, Luiz Fernando Pezão, y el pastor evangélico Marcelo Crivella irán a segunda vuelta.
El ascenso de Neves a costa de Silva
El segundo lugar logrado por el socialdemócrata Aécio Neves reforzó el papel de los partidos tradicionales, censurados por la ecologista Marina Silva, que finalmente quedó tercera.
Neves pertenece al Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), que gobernó Brasil entre 1995 y 2002 a la cabeza de Fernando Henrique Cardoso, cuyas políticas de gobierno fueron mantenidas pero ampliadas por Lula da Silva.
Por otro lado, los "indignados" que protestaron con virulencia en junio de 2013 en todo Brasil se volcaron en las elecciones a favor de Marina Silva, pero el escaso peso de este sector fue insuficiente para llevar a la segunda vuelta a la ecologista, muy desgastada en la recta final de la campaña.
Según analistas, Silva aglutinó a la gran mayoría de los que participaron en las protestas por mejores servicios públicos que sacudieron a Brasil el año pasado, pero no tuvo calado en las favelas o en las regiones más pobres del país, fieles a Rousseff.
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