Martes, 4 de noviembre de 2014
 

ESCASEZ. Muchos vecinos sólo acceden a una pileta pública, de donde acarrean en bidones y baldes el agua a sus casas.
ESCASEZ. Muchos vecinos sólo acceden a una pileta pública, de donde acarrean en bidones y baldes el agua a sus casas.

LA TEMPORADA DE CALOR AFECTA AÚN MÁS A LAS ZONAS ALTAS

Vecinos reciben agua dos veces por semana

Vecinos reciben agua dos veces por semana



Piden atención de autoridades y conciencia de vecinos de los barrios céntricos

César Vale

Con el inicio de la temporada de calor, los vecinos de las zonas altas de Sucre empiezan a sufrir aún más la carencia de agua potable, por lo que piden a las autoridades mayor atención, y a los vecinos de centro que no derrochen el líquido elemento de manera que les pueda llegar algunos litros más a la semana.
Pese a que cuentan con grifos en sus casas, los vecinos del barrio Villa San Matías, ubicado por el sector de Villa Armonía, zona norte de Sucre, sólo tienen agua dos veces a la semana que apenas les alcanza para la preparación de los alimentos.
“Nos llega agua sólo en las noches a partir de las 18:00, dos veces por semana, a veces una vez nomás y nos guardamos en turriles. Cuando nos falta tenemos que ir a buscar a otros lados”, contó el vecino del barrio Villa San Matias, Julian Choque.
Debido a la carencia de agua, casi ninguno cuenta con ducha en sus casas, por lo que el aseo personal los hacen a plan de baldes, con agua previamente calentada.
“Pedimos por favor que nos den más agua porque lo que llega hasta ahora apenas nos alcanza para cocinar”, solicitó la vecina Juana Miranda, al señalar cada litro de agua es utilizado racionalmente, por ejemplo, el agua que utilizado para lavar la ropa es guardado para echar al baño.
Los vecinos instaron a la Empresa Local de Agua Potable y Alcantarillado Sucre (ELAPAS) que haga los esfuerzos para dotarles de mayor cantidad de agua a la semana.
“Para los que somos muchos en la familia, los dos o tres turriles de agua que nos agarramos no nos alcanza. A veces ni quisiera podemos llenar los turriles, porque nos dan sólo un ratito, o no llegamos a la casa cuando está cayendo y nos quedamos sin agua”, agregó la vecina Justina Colque.
Un poco más al norte, está ubicado el barrio San Manuel, cuyos vecinos cuentan con un sólo grifo del que se abastece más de una veintena de familias.
“Algunas semanas tenemos agua, pero algunas semanas no nos dan nada y nos tenemos que hacer alcanzar como sea”, comentó el vecino Agustín Oliva.
Junto a la pileta pública, cada familia tiene dos o tres turriles con una capacidad de 200 litros, donde almacenan el agua y de ello cada día acarrean a sus casas en bidones de 5, 10 o 20 litros, algunos cargan los bidones en carretillas para no hacer varios viajes. Los niños, los adolescentes y las mujeres son los encargados de ese trabajo rutinario.
Los vecinos del sector pidieron a los vecinos del centro que cuentan con agua de manera continua, que no derrochen para que ellos puedan tener mayor acceso a este servicio vital.

. AGUA POR HABITANTE

La Organización Mundial de Salud (OMS) recomienda que cada habitante debe contar con la menos 50 litros de agua por día para cubrir su necesidades básicas.

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NECESIDAD. Tienen grifos y mangueras, pero el agua sólo les llega dos veces por semana.