En el Parque Bolívar ya no se estudia…Se baila

Mario Linares Linares.- En los últimos años, el parque “Bolívar”, este lindo y agradable espacio verde de nuestra ciudad que fuera establecido por el último gobernador de la Colonia “para el sano esparcimiento” de los habitantes de la ciudad “blanca”, se ha convertido en escenario de baile a lo largo del año, no únicamente en temporada de fiestas populares y entradas folklóricas.
A partir de las seis de la tarde, este espacio establecido para el paseo y el esparcimiento de los habitantes de Sucre, se transforma en un escenario de baile en diferentes sectores del mismo, con ruidosos aparatos de amplificación y bandas de música. Los fines de semana o el día que a cualquier institución o ciudadano se le ocurre, en un espacio de ferias de toda naturaleza y venta de comidas. La habitual característica de este espacio vital de la ciudad para el estudio, la tranquilidad y la lectura han DESAPARECIDO…..como han DESAPARECIDO los estudiantes.
Antes, hablo de pocos años atrás, era normal ver estudiantes, particularmente universitarios y normalistas, especialmente en época de exámenes, ocupar el parque para leer y estudiar en todos los bancos y otros espacios, un agradable espectáculo característico de nuestra ciudad estudiantil y universitaria, tanto que hasta los visitantes esporádicos nacionales o extranjeros quedaban admirados de cómo en nuestra ciudad el principal empeño de los jóvenes era el estudio. Hoy, ni por casualidad cuando uno se da un paseo por el parque, encuentra estudiantes “estudiando”. Lo que es frecuente en cualquier día de la semana, a partir de las siete u ocho de la noche, es ver a grupos de jóvenes ocupando los bancos públicos del parque “Bolívar” para consumir bebidas alcohólicas baratas hasta horas de la madrugada…
Cómo ha degenerado nuestra juventud y cómo termina siendo motivo de “vergüenza”, antes que “orgullo” chuquisaqueño nuestro parque, con esta clase de nuevas costumbres de la juventud que, hasta hace pocos años atrás, estaba en Sucre o venía de otras latitudes para estudiar… hoy bailan, consumen bebidas alcohólicas y, por supuesto, dejan todos sus desechos y basura el pie de los bancos que antes servían para estudiar y amanecer estudiando en un ambiente seguro y agradable. Hoy campean la inseguridad y lo desagradable acompañando a la jauría de perros vagabundos que han hecho de este espacio citadino su hábitat. Pobres las esforzadas trabajadoras y trabajadores de limpieza de la Alcaldía.
Esperemos que esa comisión de personalidades de la ciudad conformada –dice– por el Presidente del Concejo Municipal, haga que se recupere nuestro parque para el esparcimiento sano, el disfrute de la naturaleza, como para el estudio y la lectura.
Seguiremos hablando del Parque “Bolívar”.