Miércoles, 26 de noviembre de 2014
 

INDIGNACIÓN. El abogado de la familia de Michael Brown, Benjamin Crump (d), durante una rueda de prensa en Ferguson.
INDIGNACIÓN. El abogado de la familia de Michael Brown, Benjamin Crump (d), durante una rueda de prensa en Ferguson.

MUERTE DE JOVEN NEGRO A MANOS DE UN POLICÍA

EEUU: Familia de Brown dice que fallo es "injusto"

EEUU: Familia de Brown dice que fallo es "injusto"



Persiste la tensión social en varios Estados por el resultado judicial

Washington/EFE

El abogado de la familia de Michael Brown, Benjamin Crump, criticó duramente ayer al fiscal y denunció como "completamente injusto" el proceso que dejó sin un juicio al policía blanco Darren Wilson, autor de la muerte del joven, lo que provocó una noche de graves disturbios en Ferguson, un suburbio de San Luis (Misuri).
"Objetamos públicamente este proceso, fue completamente injusto", aseguró Crump en una rueda de prensa en San Luis, acompañado por los padres de Michael Brown, el joven que iba desarmado cuando murió a consecuencia de los disparos de Wilson en agosto pasado.
El letrado compareció después de que las protestas por el fallo del gran jurado desembocasen en violentos disturbios por la decisión del fiscal, Robert McCulloch, al que acusó haber mostrado poco interés en llevar adelante la imputación de Wilson y no haber presentado "los mejores argumentos".
"Un estudiante de derecho hubiera hecho mejores preguntas (que el fiscal)" al encargarse de la acusación, porque su padre era policía y fue asesinado por un negro cuando él tenía 12 años, y por su actuación en el año 2000, en un caso similar al de Ferguson.
En la conferencia de prensa, Crump estuvo secundado por el padre de Brown, quien llevaba una camiseta con el lema "Sin justicia no hay paz" pero que no ofreció declaraciones.
Poco después de conocerse la no imputación del agente Wilson, los familiares de Brown indicaron en un comunicado que, a pesar de estar "profundamente decepcionados" por el fallo judicial, "responder a la violencia con violencia no es la respuesta".
Pese a estos llamados, se teme que las protestas, que se reprodujeron en otras ciudades del país como Filadelfia, Baltimore, San Francisco, Chicago, Atlanta y Nueva York, vuelvan a tornarse violentas en Ferguson.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, aseguró ayer que "no hay excusa" para los "actos destructivos" registrados en Ferguson.
Obama insistió no obstante que ese malestar social "está enraizado en realidades" que datan de largo tiempo atrás y aplaudió las manifestaciones pacíficas que también tuvieron lugar.