Domingo, 7 de diciembre de 2014
 

El delantero portugués Cristiano Ronaldo festeja una de sus conquistas en el partido frente al Celta de Vigo.
El delantero portugués Cristiano Ronaldo festeja una de sus conquistas en el partido frente al Celta de Vigo.

ESPAÑA Cristiano Ronaldo empuja al Real Madrid a una racha histórica. El portugués marcó un triplete en la goleada al Celta

Imparable

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Madrid / EFE

Un triplete de Cristiano Ronaldo ante un Celta de Vigo fiel a su estilo pero sin remate, guió a una racha histórica a un Real Madrid que fue empujado a jugar al contragolpe pero mantuvo su pegada (3-0), para igualar las 18 victorias consecutivas del Barcelona de Frank Rijkaard.
Rebajando su brillo sin la magia de Isco Alarcón pero manteniendo la eficacia, el Real Madrid extendió la mejor de sus rachas para pedir cita con la historia el martes ante el Ludogorets gracias al insaciable Cristiano.
El triunfo en una noche gélida ante el Celta dejó la mala noticia en forma de lesión de James Rodríguez. La falta de descanso la acusó su sóleo derecho. El Mundial de Clubes, en el alambre.
Sin Modric ni Isco, el centro del campo del Real Madrid experimentaba una pareja que necesita más minutos para encajar. Kroos e Illarramendi solaparon funciones. Provocó la imagen más imprecisa del alemán.
Después de una jornada sin marcar y tras descansar en la Copa del Rey, Ronaldo necesitaba el gol. Lo rozó con una preciosa chilena, pero su remate se estrelló en la red por la parte exterior.
El fútbol directo madridista encontró la recompensa en una acción en la que el árbitro consideró penalti un ligero toque de Jonny a Cristiano a diez minutos del descanso. El portugués se dejó caer cuando vio que no llegaba al balón y no perdonó la pena máxima.
La mala noticia para el madridismo llegó a los 52 minutos. James sintió un latigazo en un gemelo y pidió el cambio.
En las botas de Gareth Bale estuvo la sentencia pero su zurdazo encontró la reacción repleta de reflejos de Sergio. El arquero ya nada pudo hacer ante un mal despeje de Cabral. Los errores en el Bernabéu cuestan caros y más si caen en botas de Cristiano. La volea del portugués fue imparable.
La recta final del duelo fue un quiero y no puedo del Celta ante un Real Madrid cómodo en su papel. Así llegó el broche y el triplete de Cristiano, con Bale viendo el desmarque de Marcelo y el brasileño poniendo en bandeja el tanto. Los de Ancelotti tienen en su mano extender ampliamente una racha sin freno.