PELIGRO. Vista de un tramo de la calle Nataniel Aguirre, una de las zonas más concurridas de la ciudad donde la actividad comercial creció de forma desmesurada durante los últimos años.

LA INTRANSITABILIDAD DE LAS ARTERIAS CREA PROBLEMAS EN LA ZONA ALEDAÑA AL MERCADO CAMPESINO

Los vecinos de la Nataniel Aguirre sufren por expansión de comercios

Sucre/CORREO DEL SUR

Indudablemente que la zona del Mercado Campesino sintetiza, de gran manera, la acelerada degradación urbana que afecta a la ciudad de Sucre desde hace varios años.
Esa zona, constituida a la par en una de las más dinámicas de la economía local, se convirtió, en contrapartida, en una de las más conflictivas debido, sobre todo, a la expansión del comercio informal instalado en varias manzanas aledañas.
Quienes viven en carne propia esa situación son los vecinos de esas arterias que a diario tienen que sufrir una serie de hechos que incomodan su actividad cotidiana y hacen que muchos de ellos se sientan impotentes ante la falta de acción de las autoridades.
El desorden del tráfico vehicular, originado en la invasión de las calles, pone en vilo a los peatones y habitantes del lugar y también impide que las autoridades puedan hacer alguna acción debido a que para ello es necesario que las arterias estén totalmente despejadas.
La gran afluencia de personas que diariamente concurren a esa zona es otro factor que incrementa la inseguridad, pues esos lugares son también frecuentados por antisociales que se convierten en una amenaza para las personas que viven y también desarrollan su actividad.
Una de las calles más afectadas por esa situación es la Nataniel Aguirre esquina Destacamento 130. En esa intersección, que ya está próxima a ser invadida por puestos comerciales, los vecinos advierten una serie de falencias que requieren de la intervención de las autoridades.
Coinciden en que el índice de accidentes (sobre todo colisiones) es muy frecuente debido –según dicen– a la falta de un semáforo en esa esquina.
Otros advierten que la calle se convirtió en área de estacionamiento de camiones que llegan de área rural cargados de productos agrícolas, lo que está generando un problema con la ocupación arbitraria de ingresos a garajes.
Pero también hay algunos vecinos que sostienen que en horas de la madrugada, los campesinos que llegan del interior del departamento son frecuentemente desvalijados por antisociales que merodean ese sector.
También, los habitantes de esa calle recuerdan que el enlosetado fue instalado hace 34 años y que hasta la fecha las losetas cumplieron ampliamente su vida útil. La Alcaldía se había comprometido hace tiempo a reemplazarlas pero hasta el momento parece que las obras siguen demoradas.
Otro elemento negativo constituye la deficiente higiene e insalubridad que está generando la gran cantidad de comercio de alimentos.
La basura acumulada está provocando la proliferación de roedores (ratas y ratones) que se crían debajo de los improvisados depósitos de alimentos que se dejan a diario sobre la calzada.
Todos estos factores adversos hacen que vivir en ese barrio se esté convirtiendo en un desafío para los vecinos que anhelan el retorno del orden y de la seguridad a una zona importante de la capital.

Comercio dificulta intervención de Tráfico

La instalación de semáforos en la ciudad requiere un procedimiento técnico que se basa en la realización de un estudio de cuantificación del tráfico vehicular.
La Dirección de Tráfico y Vialidad dependiente del Gobierno Municipal está procediendo últimamente a instalar semáforos en distintos puntos de la ciudad considerados de alto tráfico, pero además continúa su trabajo de señalización en diferentes calles y avenidas con el objetivo de normar y regular el cada vez más intenso tráfico de motorizados en la capital.
En relación a la inquietud de los vecinos de la calle Nataniel Aguirre y Destacamento 130, el responsable de Planificación de Tráfico y Vialidad, arquitecto Miguel Ángel Rojas, dijo que los vecinos deben enviar una solicitud formal ante esa oficina municipal para que la misma sea considerada.
No obstante, Rojas dijo que previamente se deberá cuantificar el aforo vehicular de esa intersección para establecer si la misma reúne las condiciones para la instalación de un semáforo o, en su caso, realizar un trabajo de señalética como se estuvo efectuando en otras zonas de la ciudad.
Rojas dijo, sin embargo, que la zona del Mercado Campesino y aledañas plantean serias dificultades debido a la invasión del espacio público que hace más lento y dificultoso el tráfico de motorizados.

LOS VECINOS

José Luis / Vecino

“La falta de educación vial de los conductores ocasiona los choques y el conflicto y desorden vial, giran de un lado a otro sin avisar”.

Tania Ancalle / Vecina

“No hay por dónde caminar es peligroso para los que compran inclusive, y otra cosa que es criadero de ratas".

Lucía Mercado / Comerciante

“Que pongan lo principal el semáforo, porque una vez un coche se vino y chocó contra una casa".

Wilfredo Peñaranda / Vecino

“Sería bien que la Alcaldía, que ya presupuestó el cambio de calzada, pueda proceder con el proyecto. Esto ya tiene 34 años exactamente”.