CUMBRE. El presidente de Uruguay, José Mujica y su homóloga de Argentina, Cristina Fernández.

ANALIZA ASUNTOS ESPINOSOS DE BLOQUE

Mercosur busca mercados pese a sus problemas

Paraná, Argentina/EFE

La XLVII Cumbre del Mercosur abordó ayer asuntos espinosos para el bloque, como los problemas comerciales y la necesidad de buscar nuevos mercados, pero la gran noticia de la cita presidencial vino de fuera: el reinicio de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos.
La histórica noticia se conoció poco antes de que los presidentes del bloque integrado por Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela se dispusieran a iniciar su cumbre semestral en la ciudad argentina de Paraná.
Y fue la anfitriona, la presidenta argentina, Cristina Fernández, que al dar por comenzado el plenario felicitó en nombre del Mercosur al pueblo cubano y a su Gobierno por iniciar un proceso de normalización de las relaciones con Estados Unidos "con absoluta dignidad y en un pie de igualdad".
Al margen de la noticia del día, el Mercosur no esquivó sus temas domésticos, en particular sus dificultades en materia comercial, con deterioro en los intercambios y la falta de avances significativos en los últimos años para firmar nuevos acuerdos con terceros países y regiones que le permitan ganar mercados.
Ante ello, Argentina destacó que este semestre, en el que comandó el bloque, culmina con la firma de dos convenios con Líbano y Túnez con vistas a profundizar el comercio.
Asimismo, en la rueda de prensa final de la cumbre, el canciller argentino, Héctor Timerman, dijo que está listo un borrador de acuerdo comercial con la Unión Aduanera Euroasiática (UAE), conformada por Rusia, Bielorrusia y Kazajistán, para su firma a partir de enero próximo.
Sigue pendiente el intercambio de ofertas con la Unión Europea, con la que Mercosur inició negociaciones en 1999.
Los suramericanos ya tienen lista su oferta y esperan que los europeos anuncien la terminación de la suya para proceder al intercambio.
Rousseff dijo que durante su presidencia dará prioridad al rediseño de la estrategia de inserción internacional del bloque, pero mientras pidió a sus socios "trabajar para recuperar la fluidez del comercio" en un "ambiente con reglas claras y disciplinas" comerciales en el bloque.


DESPEDIDA DE MUJICA
El presidente uruguayo, José "Pepe" Mujica, le dijo ayer adiós al Mercosur, la "patria grande", como gustan llamarle sus colegas suramericanos, quienes destacaron la vocación integracionista del mandatario uruguayo.
Mujica, de 79 años y quien el próximo 1 de marzo traspasará la Presidencia de su país a su antecesor, también del Frente Amplio, Tabaré Vázquez (2005-2010), prometió ante sus pares del bloque que continuará trabajando por la causa de la integración regional.
"Yo voy a seguir luchando. No voy a ser un veterano que se dedica a escribir sus memorias. Voy a estar a la orden de la causa de América Latina, esté donde esté", sostuvo Mujica al intervenir en el plenario donde recibió una prolongada ovación de sus colegas presidentes.

Rousseff

La mandataria brasileña, Dilma Rousseff, asumió su segunda presidencia temporal en el Mercosur con el desafío de revitalizar al bloque suramericano.