EDITORIAL
El poder, �instrumento de venganza?
El poder, �instrumento de venganza?
Algunos funcionarios est�n dando fuertes se�ales de que avanzamos hacia un proyecto autoritario como han denunciado en forma permanente sus detractores y, sobre todo, sus antiguos aliados
Sin explicaci�n alguna, hay muestras muy preocupantes del resurgimiento de posiciones autoritarias que poco bien hacen al pa�s. La alerta provino del propio Jefe del Estado cuando declar� que no cre�a en el principio universal, consagrado en la Constituci�n Pol�tica del Estado (CPE), del debido proceso, porque �ste s�lo daba ventajas al acusado, para, en otra oportunidad, instruir a los ejecutivos de Yacimientos Petrol�feros Fiscales Bolivianos (YPFB) no ce�irse a las leyes que puedan retrasar la ejecuci�n de proyectos, en circunstancias en las que se devel� un nuevo hecho de corrupci�n en esta empresa estatal.
Se suma la circular de Tribunal Supremo Electoral (TSE) disponiendo, por encima de la CPE y las leyes en vigencia, que los asamble�stas nacionales no pueden ser candidatos a alcaldes o concejales, pero s� a gobernadores. Se trata de una instrucci�n que tiene nombre y apellido: impedir que Rebeca Delgado, ex dirigente del MAS, sea candidata a la Alcald�a de Cochabamba pues tiene bastantes posibilidades de imponerse al candidato del oficialismo. Hay que sumar a ese presunto inter�s el hecho de que Delgado fue elegida presidenta de la C�mara de Diputados en competencia con el actual Procurador del Estado, entonces diputado. Y que evit� la aprobaci�n de un proyecto de ley inconstitucional prohijado por el mismo legislador.
Por �ltimo, hay que a�adir la actuaci�n del Ministro de Salud difundiendo el historial m�dico del suspendido magistrado Gualberto Cusi, actualmente procesado por paralizar la aplicaci�n de una Ley del Notariado prohijada, qu� casualidad, por el actual Procurador del Estado, y que fue demandada de inconstitucionalidad (en ambos casos, el Vicepresidente del Estado ha respaldado plenamente los ataques a ambos personajes).
En ese contexto, se puede colegir que en ambos casos se utilizar�a el poder para castigar a los �librepensantes�, en el caso de Delgado, y en el de Cusi por haber actuado como magistrado conforme a su conciencia y no de requerimientos for�neos, incluso en el caso de la declaratoria de inconstitucionalidad de la �re reelecci�n� de los primeros mandatarios, con la que el magistrado expres� su desacuerdo. Adem�s de que ambos personajes fueron adherentes o simpatizantes del MAS y del proceso pol�tico que este partido lleva adelante.
Si esta rese�a es correcta, parecer�a que no hay conciencia en quienes utilizan de esta manera los mecanismos del poder cuando ellos mismos se deslegitiman y ponen en cuesti�n su ret�rica sobre el cambio, pues �sta no coincide con lo que en verdad hacen. Por ello, bien har�an en reasumir como corresponde su compromiso de cumplir y hacer cumplir la CPE. Es decir, solicitar que se anule la circular del TSE, procesar a sus miembros por violar la CPE, suspender y procesar al Ministro de Salud por develar la historia m�dica del Magistrado Cusi y archivar el insostenible proceso en su contra y de dos de sus colegas.
De lo contrario, estar�n dando fuertes se�ales de que avanzamos hacia un proyecto autoritario como han denunciado en forma permanente sus detractores y, sobre todo, sus antiguos aliados.
|