El voto del sucrense

Freddy Rivas Orozco

La nueva coalición “Arriba Chuquisaca” adelantó el “Día de los inocentes” a tiempo de presentar a su candidato de consenso para el municipio de Sucre. “Nadie es profeta en su tierra” y bien podríamos escribir una “Antología del Disparate” respecto a los méritos de este candidato cuyo trabajo fue eminentemente mediático.
La participación de Jaime Barrón en los próximos comicios acompañado de la ex alcaldesa Aydeé Nava por recomendación directa y franca de nuestro actual y excelentísimo alcalde Moisés Torres Chive, utilizando la sigla FRI “Frente Revolucionario de Izquierda”, nos anticipan aquel “engaño electoral” del que fuimos víctimas los sucrenses, por la sencilla razón de que tanto Barrón como Nava actualmente enfrentan dos procesos, lo cual no les quita a ambos el reconocimiento a sus liderazgos caducados, pero sí a sus posibilidades de gobernabilidad en caso de que fueran autoridades, porque sin temor a equivocarme tendrían que dejar sus curules para enfrentar sus procesos y el municipio de Sucre quedaría a expensas del “chiveismo” que nos ha mostrado una gestión nula e inoperante.
Conscientes de aquello, en los pasados comicios electorales, Evo Morales convirtió el “voto duro” de los sucrenses en “voto blando” ¿Por qué? Por la sencilla razón de que ha demostrado manejar bien el timón del estado y conducirlo a puerto seguro; es por eso que en las urnas más pudo el “voto conciencia”, el “voto útil” de los sucrenses que el “voto opositor”, que siempre nos jugó groseras inocentadas dejándonos intrincados en la actual gestión municipal que es resultado de las coaliciones y partidos que resucitan con afanes eminentemente peguistas.
El Movimiento al Socialismo es la primera fuerza política del país que ha completado exitosamente su liderazgo en regiones donde imperaba el “voto duro” como Santa Cruz, el “primus inter pares” de la extinguida “media luna” y esto se traduce en un mayor acercamiento entre actores públicos y privados que han concretado acuerdos generando externalidades de desarrollo y motivación productiva.
Sucre está sólo a un paso de lograr este mismo acuerdo con el Gobierno y ha escogido a Iván Arciénega para concretarlo; este profesional de méritos exactos que no tiene que convencer a nadie de su prestigio académico, por segunda vez intentará ganar las elecciones municipales a través de un programa de gobierno con “llave en mano” para materializarse y con una visión “histórico-geográfica” a través de una planificación participativa con todos los distritos rurales y urbanos del municipio de Sucre.
No pretendo predecir un resultado, pero estoy seguro que en los próximos comicios el voto del sucrense será un voto “contra” y no “por”; un voto contra las groseras inocentadas, un voto contra las alianzas desmesuradas, un voto en contra de los “chaqueteros” que cambian de filiación política, un voto contra el “engaño electoral” y finalmente un voto “me quedo en casa”.
Respecto a la división visible del MAS en Chuquisaca, no creo que afecte en lo absoluto el voto del sucrense quien en las elecciones nacionales ha demostrado ser proclive pero no militante, sin embargo es necesario deponer actitudes para sumar a este propósito, aunque al advertir las guerras internas que existen me quedo con la frase “Genio y figura hasta la sepultura”.