Lunes, 12 de enero de 2015
 

El piloto chuquisaqueño Wálter Nosiglia (d) celebra con la bandera de Bolivia su llegada a la rampa de Uyuni, luego de concluir su participación en la séptima etapa del Rally Dakar.
El piloto chuquisaqueño Wálter Nosiglia (d) celebra con la bandera de Bolivia su llegada a la rampa de Uyuni, luego de concluir su participación en la séptima etapa del Rally Dakar.

RALLY DAKAR Tras la conmovedora llegada de Wálter Nosiglia y Fabricio Fuentes, al igual que los autos, las motos y cuadriciclos también dejarán Bolivia partiendo de medio del salar

Jornada de emoción

Jornada de emoción

Uyuni, Álvaro Sotomayor/CORREO DEL SUR

El Dakar se corrió en el cielo por primera vez, en una jornada histórica para los bolivianos, que además lloraron y se emocionaron con Wálter Nosiglia y Fabricio Fuentes, los abanderados y sobrevivientes en la categoría cuadriciclos y motos, respectivamente, que llegaron a Uyuni para completar la séptima etapa maratón.
La jornada dominical se abrió con el mágico inicio de la octava etapa de la categoría coches, en pleno Salar de Uyuni, con la partida de los 76 bólidos, que tuvo la particularidad única, de largar de cinco en cinco, alineados horizontalmente. Nunca antes había ocurrido tal demostración automovilística en el Dakar, cuyos participantes quedaron maravillados, según se hizo conocer a través de las autoridades bolivianas y algunos medios de comunicación internacional.
El público que se apostó en una gran parte del Salar, a pocos metros de la población de Colchani, despidió con mucha emoción a los bolivianos Marco Bulacia y Luis Barbery, aunque este último llegó muy tarde y pocos pudieron ver su arribo a Uyuni.
De todas maneras, Barbery no ocultó su emoción: “Estoy muy orgulloso de representar a mi país, no podía quedar fuera”, indicó.
El inicio de la octava etapa de coches comenzó a las 6:30, en Colchani, en territorio potosino, luego continuó por las islas de Incahuasi y Pescado para continuar por el cruce de Llica y Estación Abaroa. La ruta prosiguió por territorio orureño para retornar a Iquique y completar la octava etapa maratón, que afortunadamente, culminaron los bolivianos Bulacia y Barbery.
Bulacia lo hizo en el puesto 49, que le sirvió para ubicarse en el sitial 47 de la general; mientras que Barbery acabó 68 en la etapa y quedó 72 en la general.


ENTRE LLUVIA Y LÁGRIMAS
Tal como sucedió el sábado, Uyuni volvió a vestir sus mejores galas para la llegada de los corredores de motos y cuadriciclos, principalmente para recibir a sus dos gladiadores, Nosiglia y Fuentes.
El desfile folclórico, la feria gastronómica y la promoción de marcas en el Village fueron las actividades previas a la llegada de los corredores, empero, la lluvia conspiró contra los espectadores y pilotos.
El público apostado en la larga avenida Ferroviaria tuvo que refugiarse debajo de las graderías, otros optaron por sacar los paraguas y finalmente algunos decidieron mantenerse en sus sitios y terminar empapados. El aguacero comenzó pasado el mediodía y se extendió toda la tarde con intermitencias.
La lluvia también perjudicó a los propios corredores; a partir del puesto de control cinco de los siete establecidos, tropezaron con problemas, como la crecida de los ríos y el frío extremo.
Con la lluvia de por medio, los minutos y las horas eran interminables. El paso de los bolivianos por el séptimo way point (punto de referencia o control) pareció durar una eternidad, sin embargo, lograron zafar las dificultades para llegar a Uyuni, al promediar las 17:00. Pero valió la pena, porque Fuentes y Nosiglia hicieron derramar más de una lágrima a los espectadores.


FUENTES Y EL GRITO CHAQUEÑO
Altamente emocionado, Fabricio Fuentes llegó a la rampa de bienvenida a las 17:04, y de inmediato se sacó los guantes y el casco para vestir el sombrero chaqueño y saludar al presidente Evo Morales y al resto de las autoridades.
Dijo sentirse orgulloso de ser boliviano y que cuando uno persevera logra metas importantes. Tras su tradicional grito chaqueño, se abrazó con Juan Carlos “Chavo” Salvatierra, que minutos antes, cruzó la meta simbólica montado junto al italiano Paolo Ceci, su compañero de equipo y mochilero, que continúa en competencia.
El boliviano ocupó el casillero 52 de la séptima etapa y 55 de la general, según los datos de la Amaury Sport Organisation (ASO).


LOBO DEL DESIERTO
El recibimiento a Nosiglia fue impresionante. El chuquisaqueño llegó demorado porque en la recta final se topó con un río que no pudo pasar, tuvo que esperar varios minutos a que redujera el caudal, lo que hizo que el resto de los competidores lo alcancen.
Tras ser recibido primero por sus hijos, el Lobo del Desierto dijo sentirse emocionado. “Los amo mucho, muchas gracias Bolivia, de todo corazón, esto es único en Bolivia, muchísimas gracias señor presidente (Evo Morales); ver a tanta gente en el camino me hace poner orgulloso de ser boliviano”, manifestó con lágrimas en los ojos.
De inmediato se bajó de su cuadratrack y saludó al Primer Mandatario, con quien habló y agradeció por impulsar el paso del Dakar por Bolivia.
Otro que lo saludó fue el “Chavo” Salvatierra, con quien lleva una amistad de muchos años.
Hasta el último tramo, Nosiglia iba tercero, pero los problemas hicieron que terminara la etapa decimoprimero, pero su posición en la clasificación general es expectante, porque está sexto y con opción de pelear por el podio.

El dato

Oficialmente la ASO anunció que la octava etapa maratón de las motos y cuadriciclos se correrá por medio del salar.

LA OTRA MIRADA

TRICOLOR NACIONAL. Más de diez corredores extranjeros cruzaron la meta simbólica portando la bandera boliviana, como símbolo de agradecimiento al calor humano de los bolivianos.


AL FINAL. El presidente Evo Morales llegó al palco oficial y de honor minutos antes de la llegada de los bolivianos Fuentes y Nosiglia. El primer mandatario estuvo ausente durante gran parte de la jornada.


LA MÁS APLAUDIDA. La española Laia Sanz fue la corredora más aplaudida entre los competidores foráneos. La catalana dijo estar contenta de llegar a Bolivia tras una etapa dura.


MOJADOS. Todos los corredores sin excepción llegaron empapados y con barro. La lluvia golpeó a los pilotos que anoche se dedicaron a cuidar su salud y a poner en el mejor estado a sus máquinas.


CONCIERTO. Miles y miles de turistas nacionales y extranjeros participaron de conciertos musicales de las noches del sábado y domingo, con diversidad de grupos musicales nacionales.


MÁS DE 150 MIL. El alcalde de Uyuni, Froilán Condori, estimó que hasta ayer, domingo, más de 150 mil personas llegaron a Uyuni en los días previos y durante el Dakar, cifra que superaría la estimada, que era de 100 mil.


MUY TEMPRANO. La octava etapa maratón de las motocicletas y cuadriciclos comenzará al promediar las 7:20 de hoy, en las proximidades de Colchani, dentro del Salar de Uyuni. Con esto, el paso de los competidores del Dakar por Bolivia habrá concluido.

Fotos






Dakar 2014