Jueves, 29 de enero de 2015
 


INCIDENTES ARMADOS SACUDEN AL MEDIO ORIENTE

Muere casco azul español y vuelve tensión al Líbano

Muere casco azul español y vuelve tensión al Líbano



Un convoy israelí había sido objeto de un ataque que se atribuyó el grupo Hizbulá

Beirut/EFE

Un casco azul español murió ayer en un bombardeo israelí contra el sur del Líbano lanzado en respuesta a un ataque sobre un convoy del Ejército de Israel, reivindicado por el grupo chií libanés Hizbulá, y que causó la muerte a dos soldados israelíes.
El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, confirmó a la prensa que el militar murió en un ataque israelí en respuesta a otro de Hizbulá.
Margallo dijo que conversó por teléfono con las autoridades israelíes, que le trasladaron sus condolencias y disculpas por lo sucedido, e informó que pidió a la ONU una investigación sobre esta muerte.
El portavoz de las Fuerzas de la ONU para el Líbano (FINUL), Andrea Tenenti, afirmó por su parte a la radio pública israelí que se están investigando las circunstancias del fallecimiento porque se desconoce si el militar español murió "por fuego israelí o libanés".
Según la FINUL, el cabo falleció como consecuencia de las heridas sufridas "en el curso de esos incidentes" cuando se encontraba en el cuartel general de la ONU cerca de Ghayar.
Para la FINUL, "la causa de su fallecimiento es imprecisa aún y prosiguen las investigaciones".
El Ejército israelí también lamentó la muerte del militar en los enfrentamientos armados de ayer y aseguró que investiga los hechos para aclarar lo ocurrido.
El cabo Francisco Javier Soria, de 36 años, estaba destinado en la Brigada "Guzmán el Bueno" X de Córdoba, que forma el grueso del contingente de 580 militares españoles desplegados en el Líbano.
La Agencia Nacional de Noticias (ANN) libanesa informó de que varios cohetes israelíes impactaron contra las inmediaciones de las zonas de Al Mayedia, Kafar Shuba, Al Abasiya y Al Uazani, todas ellas ubicadas en el sur del territorio libanés, feudo de Hizbulá.
Estos ataques se produjeron después de que la milicia chií libanesa lanzara misiles contra un convoy del Ejército israelí en la disputada zona de las granjas de Chebaa, ocupadas por Israel, y un proyectil de mortero alcanzara una posición militar.
La FINUL informó en un comunicado que cinco cohetes fueron lanzados desde la región de Al Uazani, y de que la artillería israelí respondió.
Añadió que otros cinco cohetes fueron lanzados desde la región de Kafar Shuba hacia Israel, que volvió a responder a los ataques.
Las fuerzas armadas israelíes confirmaron que dos de sus soldados murieron y otros siete resultaron heridos en el ataque al convoy, que fue reivindicado por Hizbulá.
El grupo chií destacó que la facción de los llamados Mártires de Al Quneitra, con la que está vinculado, perpetró el ataque y destruyó varios vehículos de la caravana en "las granjas libanesas ocupadas".
Israel, que responsabilizó de lo sucedido tanto a Hizbulá como al Líbano y Siria, había reforzado en los últimos días su presencia militar en la frontera con esos dos países ante el aumento de la tensión en la zona.