Viernes, 6 de febrero de 2015
 

SIN FRONTERAS

Ponte el sombrero

Ponte el sombrero

Weimar Arandia.- De los 43 candidatos y candidatas que postulan a gobernadores de las diversas regiones del país, los cuatro candidatos en Chuquisaca destacan porque todos son hombres que utilizan sombrero. Es el único caso entre los postulantes en los nueve departamentos del país.
Sin lugar a dudas que esta característica llama la atención de los curiosos ciudadanos y ciudadanas que se preguntarán si es una casualidad o más bien es el reflejo de una composición sociológica dominante de la población chuquisaqueña. La hipótesis de que Chuquisaca es el departamento más soleado del país queda descartada de entrada y no explica que los cuatro candidatos utilicen el sombrero.
La afirmación de que los candidatos son el correlato mayoritario de una población rural tampoco es válida porque según el Censo de 2012, el 51 por ciento de los habitantes chuquisaqueños vive en áreas urbanas, especialmente concentrados en la zona urbana de Sucre… ¿entonces qué?
Si recordamos, la última prefecta y el primer gobernador de la historia regional son personas de origen campesino y utilizan el sombrero como una prenda que es parte de la identidad rural en un contexto urbano. Ambos fueron designados como autoridades gracias al voto mayoritario de la población urbana y sobre todo rural. Entonces, en esta lógica, es posible afirmar con rotundidad que el próximo gobernador de Chuquisaca será una persona que utiliza sombrero.
En este contexto está claro que los cuatro candidatos de sombrero traten de generar la mayor de las empatías con los votantes rurales, decisivos en anteriores elecciones. Sin embargo, al disputarse sombrero a sombrero el voto rural es muy probable que en la próxima elección los votos decisivos se den en la ciudad. Es evidente que el sombrero es la prenda fetiche de la victoria en las elecciones chuquisaqueñas, a diferencia de otras regiones del país donde el poncho es la prenda elegida por los candidatos para mostrar sus nexos con la población rural.
Ya en las pasadas elecciones judiciales, algunos postulantes más urbanos que los leones de Plaza 25 de Mayo ensayaron con el sombrero y se lo pusieron para quienes creen en la justicia plurinacional. Así el sombrero se constituye en una ventaja de marketing electoral, pero que no es aplicable para nuestros candidatos actuales que tienen a la prenda desde siempre, como signo diferenciador de un origen y una identidad; como dice un kaluyo vallegrandino “en la copa del sombrero llevó mi numeración”.
Sin duda que cada proceso eleccionario tiene sus diferencias y sus sorpresas, a excepción de las nacionales a las que el presidente Evo Morales ha hecho monótonas con sus victorias contundentes. Las subnacionales a nivel departamental de Chuquisaca plantean más preguntas que certezas con la clara apuesta de las organizaciones políticas hacia el electorado rural con el antecedente de pasados procesos. La única certeza es que el próximo gobernador de Chuquisaca será un varón que usa sombrero.