Viernes, 6 de febrero de 2015
 

BARLAMENTOS

El ‘evismo’ y el culto a la persona

El ‘evismo’ y el culto a la persona

Winston Estremadoiro.- No sé si para el 22 de enero de 2025 (cinco lustros del ‘gobierno del cambio’), o el 6 de agosto del año 2025 (Bicentenario de la República de Bolivia), estaré vivo, lúcido y como dicen los españoles, con “salud, amor y pesetas (y fuerza en las braguetas)”. Especulo que nuestro amado Presidente y Gran Timonel (Paulovich dixit) seguirá montado en el caballo del cocalero, digo, Corregidor.
Para entonces, la Plaza Murillo de La Paz se llamará Bartolina Sisa, la casa del pueblo Palacio Evo (abreviado a Palacevo) y el TAV (Tren de Alta Velocidad) La Paz-Oruro se conocerá como Taevo (aún en construcción). Ya habría estrenado dos nuevos modelitos asesorado de antropólogos: gorro de heladero y pechera de oro Inca en ritos dizque ‘ancestrales’ en Tiahuanaco, exhibidos en el Museo Pachacuti Evo en Orinoca, parte del circuito turístico del Dakar, el Salar de Uyuni, Butch Cassidy y las lagunas multicolores de Sud Lípez.
En Cochabamba, la plazuela Colón se llamará Plaza Evito. Cambiará el nombre de Lauca Eñe a Evópolis, con un Centro de Convenciones ‘Evoca’ (Evo y coca), que reuniría mandatarios afines (quedarían pocos). Llegarán al aeropuerto internacional Evo Morales en Chimoré, si es que el Cartel de los Soles opta por cocaína chapareña, hoy que se avienen Cuba y EE.UU, las FARC y el gobierno colombiano. El regalo de Patiño de predios del Hipódromo albergará a un mamotreto en forma de batán llamado Estadio Evo Futbolista; la clínica de al lado imitará a una en Chile: ‘Las Conde García’; no sé si sería ‘Súper Quintana’ o ‘Hipermercamiones’ el supermercado más arriba.
La Manzana Uno de Santa Cruz será el Tambo Evo, acortado a Tambevo por cholas venteras y chicherías vecinas. En el Carnaval estrenarán un saltarín éxito, híbrido entre taquirari y taquipayanaku, denominado ‘Taquipayevo’. ¿Y qué tal el Plan Tres Mil rebautizado a Ciudadela Collievo? Acostúmbrense los fraternos cruceños a “Cawalleros del Oriente” y logia “Evojochi”, digo, ‘Evorochi’.
En este país de fantasía, semejante catarata de sardonias del culto a la persona puede convertirse en tsunami. Al cabo, ya tenemos radionovela de 20 episodios sobre la heroica vida de Evo Morales para poner a algún uso un satélite carísimo, que quizá llegará a indígenas pobres de tierras bajas y consolará de ‘chope’ (grande) inundación de los ríos. ¿Qué tal el libro de cuentos del niño Evito? Cinco relatos breves, entre ellos “Evito va a la escuela” (se aplazó en lenguaje); “Evito juega al futbol” (manual de rodillazos y otras mañas); “Evito y el burrito tricolor” (¿qué pasó con la multicolor wiphala?), obra adulona impresa y distribuida gratis con la plata de los bolivianos.
¿Es novedad producto de megalómana borrachera de poder después de tantas reelecciones? No. Apenas asumió el poder, tuvimos estampillas y monedas con su efigie. Luego, aprobó la Constitución de La Calancha, casi a la fuerza en un cuartel orureño. Cambió el nombre del país, como si ello borrara enconos y prejuicios entre bolivianos de varias culturas y etnias. Impuso modelo educativo que enfatizaba aprender lenguas nativas siendo que él no domina ninguna: ‘patea la castellano’, de inglés sabe tres palabras, y del idioma del siglo 21 –la computación–, nada. Lo que no impidió que repartiesen miles de laptops con su imagen en la tapa.
Hoy adulones hablan de Evo Presidente ‘forever’. ¿Ignorarán que el padre de Kim Jong-il de Corea del Norte, dictadura dinástica que es, se nombró “Presidente Eterno”, y él mismo “Querido Líder? No hay muerto malo ni novia fea, pero asquea el ‘llunq’erio’ de Nicolás Maduro lloriqueando que Hugo Chávez “fue un cristiano, un redentor, un Cristo de los pobres de esta tierra”. ¿No será que muerto Evo enchufarán al país a una Eva vestida de Prada, no de pollera?
Es curioso que el culto a la persona cruza fronteras ideológicas. Hitler, Mussolini y Franco lo fomentaron. Pero también Lenin y Stalin en la extinta URSS, Mao en China, Enver Hoxa en Albania y Fidel Castro en Cuba, pese a que “el culto a la personalidad es profundamente adverso al marxismo-leninismo”, según el Diccionario Soviético de Filosofía. Seguro estoy que es recurso de falsas democracias populistas que resbalan a la autocracia. La tierra en que enraíza su endiosamiento es la ignorancia, abonada por la propaganda. Como los casos arriba imaginados o mencionados, que serían motivo de risa si no fueran tan penosos para el pueblo.
Tamaño comentario fue propiciado por la nota de que el Presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, ha decretado que se prohíbe colgar el retrato, no al mandatario, en oficinas públicas. Las placas conmemorativas de nuevas carreteras, puentes, hospitales (y en Bolivia, escuelas y gigantografías que llevan agua al molino del jefazo) solo consignarán el año en que fueran concluidos.
¡Bravo!, dijo Andrés Oppenheimer y pidió aplausos al Presidente Solís y a Costa Rica. Ojalá relievaron tal actitud en la Cumbre de la Celac en la bella capital de ese país, donde hace años se me grabó el cordial ¡con mucho gusto! de su gente. En el tórrido ambiente latinoamericano, sería un refrescante vaso de helada agua de coco, en reunión de mandamases donde menudearon los propósitos de reducir la pobreza, quizá después de opípara cena que empezó con champaña y canapés de pejivalle relleno de mariscos. ¡Chinchín y bon appetit!