Domingo, 8 de febrero de 2015
 

PIDIÓ A OBAMA NO CREER EN INFORMES "MANIPULADOS"

Maduro defiende el estado de la democracia en su país

Maduro defiende el estado de la democracia en su país

El presidente venezolano, Nicolás Maduro, le pidió ayer a su par de Estados Unidos, Barack Obama, no creer en "informes manipulados" que aseguran que "en Venezuela peligra la democracia" y tildó de "muy peligroso" que así conste en un documento que dijo circula en Washington.
"Esto es muy peligroso que usted lo haya incluido, presidente Obama, porque se está dejando engañar por informes manipulados", sostuvo el jefe de Estado de Venezuela en una alocución retransmitida en cadena nacional.
Maduro repitió que por ese documento, llamado "Estrategia de seguridad nacional de Estados Unidos", así como por previas declaraciones de distintos funcionarios estadounidenses, convocó "de urgencia" a la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) y a la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).
"Yo busqué a UNASUR y a la CELAC y mañana (hoy) domingo y el lunes habrá una reunión en Montevideo (Uruguay) del grupo de cancilleres de apoyo a Venezuela para un escudo protector ante el golpe de Estado promovido por Estados Unidos contra el Gobierno que yo presido", remarcó.
El documento estadounidense, cuya redacción Maduro atribuyó a Obama y por igual a sectores que promueven guerras, invasiones y golpes de Estado, compromete el apoyo de Estados Unidos a grupos de ciudadanos de países donde se supone que peligra la democracia.
Tras mostrar el documento estadounidense y repetir que Obama "no sabe la indignación que siente el corazón de un venezolano cuando escucha las mentiras allí" anotadas, Maduro dijo confiar plenamente en que los gobiernos del continente actuarán oportunamente.
Para Maduro, la intención estadounidense apunta a invocar en su contra la Carta Democrática Interamericana de la Organización de Estados Americanos (OEA) en lo que respecta a aislar a los gobiernos del continente que se aparten de los preceptos democráticos. EFE