Jueves, 26 de febrero de 2015
 

HABLANDO DE HIDROCARBUROS

Energía nuclear en Bolivia

Energía nuclear en Bolivia

Hugo del Granado Cosio / En su discurso de inauguración del “Encuentro por la Soberanía Hidrocarburífera”, el presidente Morales, el año 2013, mencionó que “hay estudios y quiero que sepan que con nuestro hermano Vicepresidente ya soñamos contar con energía nuclear atómica y no estamos tan lejos”, que varios países europeos además de Argentina estaban interesados en aportar a su desarrollo. (LT 30-10-13). A mediados de 2014, el Presidente se reunió con el primer vicepresidente de Irán, Eshaq Jahangiri, para acordar un plan de asesoramiento técnico.
En octubre del año pasado, el Presidente precisó que el 2025 se instalará el Complejo de Energía Nuclear en La Paz con una inversión de más de 2.000 millones de dólares (MM$us). (PS 03-10-14). El Ministerio de Energía, completó la información señalando que el Plan Nuclear Boliviano se aplicaría en cinco ámbitos: 1. Un ciclotrón para tener diagnósticos médicos. 2. Un radiador gama para esterilizar alimentos, mejorar la calidad de semilla y aumentar la productividad. 3. Una central nuclear para generar energía eléctrica. 4.- Cuantificar la presencia de uranio y torio en el país. 5. Un reactor con fines investigativos (UCOM 18-02-2015). Para tal efecto, este año se destinarán 2 MM$us (Millones de Dólares) para arrancar el Plan. Y tal es la importancia que el Gobierno da a este proyecto que en el programa de gobierno 2015 – 2020 ya está planteada la construcción del reactor nuclear y es uno de los grandes proyectos de la Agenda Patriótica 2025.
Se debe aclarar que el ciclotrón PET/CT y el radiador gamma son sólo aparatos que irradian positrones y rayos gamma respectivamente, no son plantas y menos complejos nucleares y no son fuentes de generación de energía eléctrica.
Otro concepto equivocado es creer que se podría instalar uno o más reactores modulares de pequeña capacidad de generación eléctrica (300 Megawatts- MW). Este tipo de plantas no existen, están en etapa investigativa, no hay todavía ningún modelo probado. El reactor más común y comercial que existe en mercado es el de 1 Giga Watts (1GW es igual a mil MW)).
El componente problemático del “complejo nuclear” es la instalación de un reactor de fisión para producir electricidad, no sólo porque Bolivia no necesita de esta fuente alternativa de energía, sino por los riesgos que ello conlleva y sus connotaciones geopolíticas. Veamos cada uno de estos factores.
El descontrol de la operación de un reactor es un problema latente (recuérdese a Three Mile Island, Chernobil y Fukushima), a pesar del avance de la tecnología y de regulaciones cada más estrictas. Sin embargo, a fines de 2014 cerca de 440 reactores operaban en todo el mundo (entre ellos en Brasil y Argentina), sin problemas y hay otros 40 países que están considerando introducir reactores nucleares incluyendo a Chile, Perú, Uruguay, Venezuela y Bolivia en Sudamérica; lo que demuestra que el descontrol, pese a su dimensión, podría ser remoto frente a los demás problemas. Otro riesgo emergente es el tratamiento de los residuos nucleares. Hasta ahora y después de 60 años de operación de estas plantas, no existe un solo depósito permanente de residuos, todos son temporales o son proyectos.
Los problemas geopolíticos tienen que ver con el control de la proliferación de armas nucleares porque el proceso de enriquecimiento de uranio para estas plantas es exactamente el mismo que para fabricar armas atómicas. Por ello la desconfianza de los países respecto a proyectos nucleares de sus vecinos. Irán es una muestra del control mundial sobre estos reactores.
En Bolivia se tiene abundancia de fuentes alternativas de energía, renovables y no renovables como para no tener que acudir a la energía nuclear en busca de seguridad energética. Por otra parte, la inversión es muy alta, actualmente es de 6000 $us/MW (Dólares por Mega Watt), sólo en el reactor.
Una planta tipo que tiene una capacidad de 1 GW significaría una inversión de 6000 MM$us. Para absorber esta cantidad de energía eléctrica el país debería tener una red de distribución eléctrica de 10 GW y la red actual llega sólo a 1GW; la solución podría ser conectarse a las redes de Chile o Perú.
Otro grave problema es el enorme consumo de agua para el enfriamiento. Se necesitarían cuatro millones de metros cúbicos por día para una planta de 1 GW, casi igual al consumo diario de Nueva York y 32 veces más que el consumo diario de agua potable de las ciudades de El Alto y La Paz (juntas consumen menos de 125 mil M3/Día.)
Finalmente, Bolivia sería dependiente del uranio; en tanto no descubra, cuantifique y enriquezca sus reservas, tendría que importar alrededor de 180 toneladas/año; en cambio, con gas natural podríamos generar la misma cantidad de electricidad con cerca de 5 MMM3/D.