MEMORIA. Los heridos y familiares de las víctimas de los hechos de La Calancha continúan clamando justicia.
MEMORIA. Los heridos y familiares de las víctimas de los hechos de La Calancha continúan clamando justicia.

“Los que nos traicionaron, han sido premiados”

“Los que nos traicionaron, han sido premiados”

Han pasado seis años desde los cruentos enfrentamientos en La Calancha

Sucre/CORREO DEL SUR

Las lágrimas por el dolor se secaron hace años; las que brotan ahora, son de impotencia. Cada que llega el mes de noviembre es así, la sangre hierve y un sinfín de memorias vuelve. Los compromisos vertidos retumban en la mente de quienes, sin desearlo, se convirtieron en el símbolo de una batalla. Han pasado seis años. Los familiares de las víctimas de los hechos de La Calancha aún no encuentran justicia. La investigación de las tres muertes de fines de noviembre de 2007 quedó suspendida en una suerte de nebulosa que no reporta avances y sólo muestra parcialidad. Tampoco los heridos y mutilados hallan sosiego; han aprendido a vivir con las secuelas de las balas y con el dolor de la indiferencia. Sienten que esa ciudad que un día, alborozada, los declaró héroes, ya los ha olvidado. El premio, coinciden, supieron capitalizarlo otros; paradójicamente aquellos que traicionaron su lucha.
Al menos esa es la percepción que tienen Juan Cardozo, representante de los familiares de las víctimas de los cruentos sucesos de La Calancha, y Ricardo Durán, uno de los mutilados, de ese inolvidable pasaje de la vida de esta ciudad en el que la población se levantó en contra de las sesiones conclusivas de la Asamblea Constituyente en 2007 por su rechazo a debatir el retorno de los poderes Ejecutivo y Legislativo a Sucre.
“Recordar nuevamente es llenarnos de impotencia porque la población a nivel nacional sabe que el Gobierno no actúa de forma imparcial. En vano decimos que hay independencia de poderes, no es cierto, no hay justicia”, dice Cardozo, quien cree que una decisión política paralizó la investigación.
El caso denominado La Calancha se encuentra desde 2008 a la espera de la autorización de la Asamblea Legislativa. Un requerimiento acusatorio del ex fiscal General, Mario Uribe, contra el entonces ministro de Gobierno, Alfredo Rada, y tres jefes policiales fue devuelto desde la Asamblea a raíz de un amparo interpuesto por un jefe policial involucrado. Tuvieron que pasar dos años para que sea repuesto y desde entonces duerme el sueño de los justos. “Si bien la justicia no llega ahora, no hay poder que dure cien años”, añade Cardozo al resumir la frustración de varias familias que perdieron lo más valioso que tenían.
Su hermano, José Luis, agonizó durante dos días con un proyectil en la cabeza tras los cruentos enfrentamientos con la Policía. Murió el 26 de noviembre de 2007. Dos días antes, mientras el MAS apresuraba la aprobación de la Constitución que dio pie al nacimiento del Estado Plurinacional, otro joven, Gonzalo Durán, también fallecía tras el impacto de una bala. La tercera víctima fatal fue Juan Carlos Serrudo; murió el 25 de noviembre después de que una granada de gas le explotara en el pecho.
“No sólo era la lucha por justicia, libertad y democracia, sino por los intereses de nuestra región”, añade Durán, que al igual que miles de jóvenes había salido de su casa para expresar su protesta por la discriminación de la propuesta de Capitalidad del debate constituyente. Para él, la demanda capitalina obedecía a un grito desesperado de progreso.
Durán considera que es el fiscal General, Ramiro Guerrero, el llamado a interponer sus buenos oficios para que las víctimas de La Calancha descansen en paz. Sin embargo, recuerda que Guerrero fue asambleísta del MAS en representación de Chuquisaca.
“Los mismos asambleístas fueron los que nos dieron la espalda, Ignacio Mendoza (actual senador), el doctor (Edgar) Arraya que estaba con nosotros y luego nos dio una puñalada por la espalda vendiéndose por un cargo al MAS. Son muchas personas traicioneras en el departamento. Ana Calvimontes de la C-3, el mismo Esteban Urquizu (ahora Gobernador), varios asambleístas que se volvieron autoridades. La población ha comprendido quiénes son los traicioneros”, reniega Cardozo, a quien incluso le hablaron de la idea de un resarcimiento económico para enterrar el tema con un acto de desagravio de por medio.
Un papel indigno, asegura Cardozo, lo jugó el entonces asambleísta Edgar Arraya que abandonó al MAS y abanderó el ala radical del Comité Interinstitucional al punto de que hizo fracasar las negociaciones en curso entre el Gobierno y las regiones de Sucre y La Paz. Fue jefe de campaña de la ex prefecta Savina Cuéllar y cuando empezó la “persecución política” a los líderes de la ciudad, volvió a filas masistas y tiene un cargo en la Fiscalía.
Orlando Ceballos, Ana María Oporto, entre otros, también reclamaron cargos en la administración pública.
El MAS premió a todos, dice Durán. Cardozo recuerda que ministros, altas autoridades, legisladores y funcionarios públicos por doquier, emergieron de filas de un proceso constituyente que terminó abruptamente y que finalmente fue desvirtuado con un retoque de cerca de 150 cambios que concretó el Congreso Nacional.
Pero hay más, a decir de los entrevistados. El entonces prefecto, David Sánchez, logró paralizar procesos judiciales en su contra y luego reclamó un curul de senador o Damián Condori que fue partícipe de las negociaciones por la Capitalidad y ahora funge como alto ejecutivo campesino.
A nivel nacional, el ex ministro Alfredo Rada, Sacha Llorenti, entre otros también fueron protegidos y recompensados, señalan.


INDIFERENCIA
Durán protesta también por autoridades, instituciones y una población sucrense que al principio los apoyaron pero luego los olvidaron. Él necesita desde hace varios años reponer la prótesis de su brazo derecho. El sueldo no muy expectable que tiene en una facultad de San Francisco Xavier, además de los gastos de sus hijos, impiden que pueda reunir dinero para adquirirla.
César Leaño tiene la misma carencia pero además necesita con urgencia un trasplante de córnea para no quedarse ciego; la granada que explotó en su mano sigue retumbando en su cabeza. Juan Carlos Saavedra también tiene problemas con el platino que le pusieron en su mandíbula destrozada; David Solíz no se recupera totalmente de la bala que ingresó en su cabeza.
Ante la indolencia, los heridos y familiares no descartan lanzarse a la arena política, al año, para tener voz propia.
Con la venta de CD’s, esta próxima semana, esperan reunir algunos recursos para sus múltiples necesidades. También habrá un concierto con música de la Capitalidad, el próximo viernes, una marcha, una misa el domingo y otras actividades de homenaje.
“Si no hallamos respuesta plantearemos acciones a nivel internacional, iremos ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos”, enfatiza Cardozo.
“Nada es eterno, Dios sabe que la justicia tarda pero llega”, susurra Durán.

Justicia

Nada es eterno, Dios sabe que la justicia tarda pero llega".
Ricardo Durán / Mutilado