TRAGEDIA. Varias personas buscan los cuerpos de las víctimas tras el alud.

HAY CASI 3.000 FALLECIDOS O DESAPARECIDOS

Tras el deslave en Afganistán, asignan ayuda humanitaria

Kiev/Agencias

Autoridades afganas abandonaron ayer toda esperanza de encontrar sobrevivientes en el colosal deslizamiento de tierra en el noreste del país, donde se calcula que el número de fallecidos o desaparecidos alcanzaría a unas 2.700 víctimas.
La ONU dijo que la atención se centra ahora en ayudar a los más de 4.000 desplazados.
Organizaciones internacionales y funcionarios afganos dijeron que el menos 300 viviendas de adobe quedaron enterradas bajo el lodo el pasado viernes, aunque era difícil conocer información precisa sobre el número de víctimas fatales.
Una misión de la ONU en Afganistán dijo que más de 350 personas murieron, aunque un portavoz del Gobierno local ubicó la cifra por sobre las 2.100 víctimas. La Organización Internacional para las Migraciones (OIM), con sede en Ginebra, dijo que 2.700 personas estaban muertas o desaparecidas.
"La escala de este deslave es absolutamente devastadora, con una aldea entera prácticamente arrasada", dijo Richard Danziger, jefe de la misión de OIM en Afganistán. "Cientos de familias han perdido todo y requieren de asistencia considerable", agregó.
La misión de la ONU en Afganistán dijo que la atención se centra ahora en los más de 4.000 desplazados, ya sea directamente como resultado del deslave o tras ser evacuados de otros pueblos cercanos como medida de precaución.
La principal necesidad es el agua, apoyo médico, comida y equipos de emergencia para acampar, dijo Ari Gaitanis, portavoz de la misión de asistencia de la ONU en Afganistán.