Viernes, 23 de enero de 2015
 

POLÉMICA. Viviana Fein, fiscal que investiga la muerte de su colega Alberto Nisman, trata de responder las interrogantes de los periodistas.
POLÉMICA. Viviana Fein, fiscal que investiga la muerte de su colega Alberto Nisman, trata de responder las interrogantes de los periodistas.

LA INVESTIGACIÓN EN ARGENTINA AVANZA CON MÁS SOMBRAS QUE CERTEZAS

Contradicciones y cabos sueltos en el caso Nisman

Contradicciones y cabos sueltos en el caso Nisman



La Presidenta argentina dijo estar convencida de que el fiscal Nisman no se suicidó

Buenos Aires/Agencias

Las contradicciones y cabos sueltos alrededor de las circunstancias de la muerte del fiscal argentino Alberto Nisman se multiplican en una investigación judicial que cumple hoy cinco días y avanza con más sombras que certezas. En este escenario, la presidenta argentina, Cristina Fernández, dijo ahora que está "convencida" de que la muerte del fiscal "no fue un suicidio.
Horas después de trascender el fallecimiento de Nisman, el pasado lunes, la Secretaría de Seguridad argentina emitió un comunicado en el que aseguraba que la puerta del apartamento del fiscal estaba cerrada con llave desde dentro cuando lo hallaron muerto de un disparo en la cabeza.
Sin embargo, el cerrajero que franqueó el acceso a la vivienda de Nisman informó que no abrió la puerta principal como se pensaba hasta el momento, sino la puerta de servicio, que no estaba cerrada con llave y podía abrirse con facilidad "por cualquiera".


MÁS INTERROGANTES
La fiscal que investiga la muerte, Viviana Fein, declaró ayer que, según la madre de Nisman, Sara Garfunkel, la puerta de servicio también era blindada y contaba con dos cerraduras, una que estaba cerrada con llave y abrió con su copia y otra que no estaba cerrada pero tenía puestas por dentro las llaves, que fue la que abrió el cerrajero con ayuda de un alambre.
Aun así, los investigadores estudian si alguien pudo acceder a través de un tercer acceso que comunica la casa de Nisman con un estrecho pasillo en el que se encuentra el aire acondicionado del edificio.
Aunque Nisman estaba amenazado y contaba con una custodia de diez hombres de la Policía Federal, éstos declararon a la fiscal que no hacían guardia frente a su apartamento, sino en la acera del edificio y ni siquiera las 24 horas del día.
Además, el personal de guardia no revisó las pertenencias del colaborador de Nisman, Daniel Lagomarsino, cuando éste en su visita del sábado le entregó la pistola que el fiscal le había pedido prestada y que le provocó la muerte. Según Lagomarsino, Nisman le confió que el influyente ex director de Operaciones de la Secretaría de Inteligencia Antonio "Jaime" Stiuso le había prevenido contra su custodia.
Stiuso es también uno de los blancos de la presidenta Cristina Fernández, quien lo acusa de haber hecho "algo más" que dirigir la investigación de Nisman que culminó en una denuncia por supuesto encubrimiento de terroristas contra la Mandataria y algunos de sus colaboradores.
Se desconoce el paradero del ex agente argentino, aunque la fiscal que investiga la muerte de Nisman desestimó llamarlo a declarar.
Hasta el momento, una de las pocas certezas es que el arma que causó la muerte del fiscal fue la pistola que le prestó Lagomarsino y que fue localizada bajo su cadáver.
Aunque la autopsia determinó que no hubo participación de terceras personas en la muerte de Nisman, la ausencia de rastros de pólvora en sus manos impide por ahora determinar que se trata de un suicidio y deja todas las hipótesis abiertas.


FERNÁNDEZ CONVENCIDA DE QUE NO FUE SUICIDIO
La presidenta Cristina Fernández volvió a elegir las redes sociales para referirse a la muerte de Nisman. Desde su cuenta oficial de Twitter, la Presidenta remitió una nota escrita en primera persona en la que tira por la borda la –hasta ahora– versión oficial de los hechos: "Estoy convencida que no fue suicidio", aseguró.
"Los espías que no eran espías. Los interrogantes que se convierten en certeza. El suicidio (que estoy convencida) no fue suicidio.", con estas líneas Fernández dio por tierra con la principal hipótesis sobre la muerte del fiscal.
El marcado giro en el discurso oficial experimentado en las últimas horas se ve reforzado por las propias palabras de la Mandataria cuando aseguró que a Nisman "lo usaron vivo y después lo necesitaban muerto. Así de triste y terrible".
En este sentido, la Presidenta se mostró convencida de que el fiscal no se suicidó. "No tengo pruebas, pero tampoco tengo dudas", sostuvo.


LAS "CERTEZAS" DE FERNÁNDEZ
"A esta altura los interrogantes que me planteaba el 19 de enero (cuando publicó una primera carta donde menifestaba sus observaciones al proceso judicial), se van convirtiendo en certezas, igual que cuando se avanzaba en la investigación de la causa AMIA", señaló Fernández.
Sostuvo además que "la denuncia del Fiscal Nisman nunca fue en sí misma la verdadera operación contra el Gobierno. Se derrumbaba a poco de andar. Nisman no lo sabía y probablemente no lo supo nunca. La verdadera operación contra el Gobierno era la muerte del Fiscal después de acusar a la Presidenta, a su Canciller y al Secretario General de La Cámpora de ser encubridores de los iraníes acusados por el atentado terrorista de la AMIA".

Más revelaciones

La fiscal Viviana Fein reveló también que en las últimas horas fue allanado el domicilio de un periodista al que un custodio le entregó un sobre facilitado por Nisman la víspera de su muerte.
Sin embargo, el periodista Laureano Pérez Izquierdo replicó que no fue su vivienda, sino otra contigua, la que fue revisada y aseguró que tiró el sobre al momento de recibirlo porque la información que contenía era "más de lo mismo" y ya la había plasmado en una nota previa.